La organización de Protección del Medio Ambiente de Hurgada advirtió hoy al gobierno de Egipto sobre los efectos negativos de un eventual exterminio de tiburones en el mar Rojo, porque empeorará el balance ecológico y no solucionará los problemas del turismo, informó la agencia egipcia Al-Ahram.
"El exterminio de los tiburones afectará más el balance ecológico en el mar Rojo y acarreará consecuencias irreversibles, que a largo plazo, causarán más daños al turismo de Egipto, que los ataques de esos escuálos", aseguraron los especialistas y recordaron que de acuerdo con las leyes del país, desde 2006, la caza de tiburón se considera un delito punible.
Conforme al documento presentado, la aniquilación de tiburones responde a una “bárbara” iniciativa de la administración de la provincia del Sinaí del Sur, que, según los ecólogos, tiene intención de solucionar el problema de los ataques de tiburones y detener la caída aguda del turismo en el país.
Al mismo tiempo, el gobierno egipcio, se abstiene de comentar informaciones en Internet y en la prensa extranjera, sobre la muerte de un turista serbio por un ataque de tiburón en el balneario de Sharm el-Sheij.
A principios de diciembre cerca del balneario turístico Sharm el-Sheij, se registraron cinco ataques de tiburones contra turistas. Entre las personas afectadas figuran, tres turistas rusos y un ucraniano. El 5 de diciembre, una turista alemana, de 70 años, murió tras ser atacada por un tiburón cerca de la playa del hotel Hyatt Regency, en la bahía de Naama Bay.
