El estado del reportero del rotativo ruso Kommersant, Oleg Kashin, apaleado bárbaramente en Moscú en la noche del viernes al sábado, sigue grave pero es estable, informó su esposa Evguenia Milova, también periodista de Kommersant.
“Oleg está en coma inducido (provocado especialmente con medicamentos). Tiene fracturas de pierna y mandíbulas y un trauma del cráneo”, escribió Milova en su página web de la red social Facebook.
Kashin fue apaleado brutalmente la noche pasada. Lo internaron en estado grave en la sección de reanimación de un hospital capitalino y lo operaron.
Sus colegas vinculan ese ataque con la actividad profesional de Kashin, quien se especializa en la temática socio-política. En particular, cubrió la actividad de varias agrupaciones juveniles y de la oposición y también el conflicto de tala del bosque en el distrito capitalino de Jimki.
El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, encargó al Fiscal General y al ministro del Interior de Rusia tomar bajo un control especial la investigación de ese crimen.