Tel Aviv, 4 de agosto, RIA Novosti. Las Fuerzas de Paz de la ONU confirmaron hoy que los militares israelíes no cruzaron la frontera con Líbano y se encontraban en el territorio de Israel cuando empezó el intercambio de disparos en la frontera entre ambos países que causó cinco muertos el martes pasado.
Las declaraciones de los "cascos azules" concuerdan con la versión expuesta por los israelíes, que acusan a las tropas libanesas de una agresión no provocada, y divergen de la interpretación de la parte libanesa que afirma haber abierto fuego en respuesta a la violación de la frontera por los militares israelíes.
Los israelíes aseguran que el primer disparo fue hecho por un francotirador libanés, que mató a un teniente coronel e hirió a un capitán del Ejército israelí. Los militares israelíes respondieron abriendo fuego con armas de tiro y después utilizaron la artillería y la aviación.
Según los medios de prensa, las tropas libanesas registraron tres muertos. También perdió la vida un periodista local.
Desde que terminó la Segunda Guerra del Líbano, en agosto de 2006, los milicianos libaneses lanzaron varios ataques con misiles contra Israel, pero hasta hoy no hubo casos de enfrentamientos directos entre las tropas regulares del uno y otro país.
Los militares israelíes no descartan que el ataque pudiera ser planificado de antemano y que detrás de ese acto estén fuerzas vinculadas con el movimiento radical de los chiíes libaneses, Hezbollah.