Moscú, 8 de julio, RIA Novosti. Según unos psicólogos de Australia, las bebidas dulces contibuyen a eliminar el estrés y disminuyen la agresión. Té con azúcar, por ejemplo, carga con energía el cerebro, lo que permite tener bajo control los impulsos, escribió The Telegraph.
Científicos montaron un experimento en un grupo de voluntarios. Al darles unas tareas que requieren considerables esfuerzos , a unos sirvieron limonada con azúcar y a otros, refresco con endulzador artificial. Luego los criticaron. Quienes tomaron limonada con azúcar reaccionaron con más tranquilidad a las observaciones críticas que otros.
Los científicos australianos están seguros de que el consumo de bebidas dulces puede ayudar, por ejemplo, a soportar mejor unas negociaciones difíciles, a eliminar el estrés tras una tensa jornada laboral, y como consecuencia, disminuir impulsos agresivos dirigidos a los familiares.