ONU, 4 de mayo, RIA Novosti. Desde el primer día de la conferencia de Naciones Unidas sobre el cumplimiento del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP), que comenzó ayer en Nueva York, el foro se convirtió en un "duelo" entre el presidente de Irán , Mahmud Ahmadineyad, y la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton.
Cada una de las partes procuró destacar su compromiso con la no proliferación y el desarme nuclear, al tiempo de criticar a su contrincante.
Así, el líder iraní reveló la disposición de la República Islámica de intercambiar uranio por combustible nuclear como propuso Rusia y Francia, pero arremetió contra EEUU por su doble rasero en política nuclear y reclamó un cambio radical al respecto.
"Irán siempre ha estado de acuerdo (con el canje de uranio), y quiero declarar una vez más que esa opción es aceptable para Irán y que hemos presentado nuestra propuesta al respecto. Ahora la pelota está en el terreno de otros estados, que deben aceptar nuestras propuestas", dijo Ahmadineyad.
Al mismo tiempo, el mandatario iraní aprovechó para reclamar la suspensión de EEUU y otros países del OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) por "amenazar a países no nucleares con la utilización de armas atómicas".
"¿Cómo EEUU puede ser miembro de la Junta de Gobernadores (de OEIA) si no solamente lanzó bombas nucleares contra Japón, sino que además utilizó armas con uranio poco enriquecido durante la guerra en Iraq?", preguntó Ahmadineyad al pleno de la Asamblea general de la ONU.
Por su parte, la jefa de la diplomacia estadounidense acusó a Irán de violar las reglas del Tratado de No Proliferación, enriquecer uranio pese a las resoluciones restrictivas del Consejo de Seguridad de la ONU y calificó de "ataques delirantes" las críticas de Ahmadineyad.
Clinton puso en entredicho la aceptación de Teherán de enriquecer uranio en Rusia y Francia y pidió pruebas del cambio de su comportamiento.
"Si Irán efectivamente ha cambiado su postura, debe presentar a OEIA claras pruebas de ello", concluyó la secretaria de Estado de EEUU.
Durante la intervención de Ahmadineyad, las delegaciones de EEUU, Gran Bretaña y Francia abandonaron la sala de la conferencia, en protesta contra los ataques del líder iraní.