Astana, 13 de marzo, RIA Novosti. A los propietarios del dique que se rompió en el sur de Kazajstán provocando inundación y 35 muertes se les exigirá responsabilidad penal, declaró hoy el presidente de la república Nursultán Nazarbáev.
"Treinta y cinco personas perecieron", dijo el Jefe de Estado, al convocar una reunión extraodinaria con los miembros del Gobierno para prestar ayuda a los daminifiacdos por la inundación.
Copiosas precipitaciones y el desnieve provocaron el jueves pasado el derrubio y la ruptura del dique en el embalse de Kizil-Agash, provincia kazaja de Alma-Atá. Quedaron inundadas viviendas en varios poblados. Se realiza la evacuación de la gente de la zona afectada. Las víctimas mortales ascendieron a 35. Anteriormente se informó de 30 muertos. Fue parado el movimiento por ferrocarril y en varias carreteras.
El primer ministro de la república Karim Masímov informó que los propietarios del dique no habían cumplido las obras de profilaxis reglamentadas.
"Hace falta incoar causa penal contra los propietarios del dique", señaló Nazarbáev.
El Gobierno de Kazajstán asignará recursos el próximo lunes para ayudar a los afectados por la inundación.
En las zonas del país donde cayó mucha nieve este invierno se realiza la inspección de las instalaciones hidrotécnicas, para prevenir nuevos siniestros.