El objetivo de Víctor Yúschenko es transformar a Ucrania en un protectorado de EEUU y la OTAN, piensa Vitali Tretiakov, director del semanario ruso Moskovskie Novosti.
"Ya es a todas luces evidente para qué Yúschenko ha montado todo ese caos controlado con la celebración de comicios anticipados que difícilmente ayudarán a su partido (Nota: Nuestra Ucrania) a mejorar la posición en el Parlamento", escribe Tretiakov en un artículo publicado por Nezavisimaya Gaceta.
"El presidente de Ucrania quiere cambiar radicalmente la Constitución en vigor para lograr dos objetivos. El primero y el más importante es refrendar en la Carta Magna el máximo posible de los compromisos relacionados con el ingreso de Ucrania en la OTAN. Hoy en día, Ucrania permanece oficialmente al margen de las alianzas militares", señala Tretiakov. Más que un deseo personal de Yúschenko, la adhesión a la OTAN es una instrucción que le dieron sus patronos de Washington, opina el articulista. "Y puesto que la población - prácticamente toda la comunidad rusa de Ucrania y la mayoría de los ucranianos - se opone al ingreso, hay que imponer esta opción en la Ley Fundamental".
"El segundo objetivo de Yúschenko es que Ucrania vuelva a ser una república del modelo presidencial parlamentario o, a ser posible, simplemente presidencial. Todo ello, a pesar de que en las elecciones de 2004, durante el antagonismo con Yanukóvich, defendió públicamente la demanda de una reforma constitucional que hiciese de Ucrania una república parlamentaria. Esta consigna, por cierto, fue una de las premisas para la victoria de Yúschenko, forzada por Occidente".
"Para impulsar una contrarreforma constitucional, Yúschenko necesitaba, en primer término, provocar una crisis política que demostrase su fuerza personal. Y lo consiguió, dado que finalmente empujó a la Rada Suprema (Parlamento) a la disolución y a la convocatoria de nuevas elecciones".
"La idea de nuevas enmiendas constitucionales podría presentarse como única solución razonable ante cualquier crisis, incluida la actual, en medio del caos que el bando naranja en general, y Víctor Yúschenko y Yulia Timoshenko en concreto, han provocado en Ucrania. Hoy en día, Yúschenko se encarga de publicitar esta idea y trata de mentalizar a la opinión pública".
"En suma, estamos presenciando un engaño total del electorado ucraniano, incluida la gente que votó a favor del propio Yúschenko. Pero los demócratas proatlantistas no saben de escrúpulos".
"El objetivo final de todo ello es, obviamente, provocar una ruptura definitiva entre Kiev y Moscú para entregar a Ucrania bajo el protectorado de EEUU y la OTAN. La independencia es lo último de que se trata aquí".
"La política de Moscú con respecto a Yúschenko y a todas sus reformas debería tomarlo en cuenta y ser inclaudicable", concluye el articulista.
