Según comunica el Servicio de Investigaciones del Congreso USA, en 2005, Rusia por primera vez se adelantó a EE.UU. por el volumen de armas convencionales suministradas a países en desarrollo, pero expertos rusos ponen en duda estos datos.
Colaboradores del Servicio de Investigaciones del Congreso USA catalogan entre los países en desarrollo a todas las naciones salvo EE.UU., Rusia, Japón, Australia, Nueva Zelanda y los países europeos (pero no está claro si incluyen en la lista de los países industrializados, digamos a Albania o Macedonia).
Entre 2002 y 2004, EE.UU. mantuvo incuestionable liderazgo por el volumen y el precio total de los contratos de suministro de armas convencionales a los países en vías de desarrollo, pero el año pasado tuvieron que ceder el primer lugar a Rusia y Francia. Según comunican los autores del informe, en 2005, Rusia concertó contratos de suministro de armas por el montante de $7.000 millones; Francia lo hizo por $6.300 millones, mientras Estados Unidos, por $6.200 millones.
El principal comprador de armas rusas, sobre todo de aviones y buques de guerra, sigue siendo China. Especial preocupación de los expertos norteamericanos provocó la adquisición por China de los aviones militares de transporte Il-76TD y de los aviones cisterna Il-78M. Los autores del informe señalan que disponiendo de tales vehículos, China en todo momento podrá realizar un desembarco aéreo masivo en Taiwán, poniendo de este modo bajo amenaza los intereses de EE.UU. en el área.
En expertos rusos los datos publicados suscitan dudas. "Pese a todo, EE.UU. sigue siendo el principal exportador de armas en el mundo", está convencido Dmitri Vasiliev, director de la revista Exportación de armamentos. "El problema, quizás, estriba en que los autores del estudio no tomaron en consideración las donaciones del material a los países aliados de EE.UU.", aclara el experto. Concretamente, en el último decenio, EE.UU. regaló mucho armamento a antiguas repúblicas de la URSS, tales como Kazajstán, Moldavia, Georgia y otros.
Rusia, en cambio, de momento no está en condiciones de hacer regalos tan generosos. Según los datos facilitados por el Servicio Federal para la cooperación técnico-militar, en el período entre 2000 y 2004, Moscú vendió armamento a otros países por importe de $22.700 millones. El año pasado, las exportaciones rusas de armamento se situaron en $6.126 millones (estaba planeado exportar por $5.100 millones).
De todas formas, se espera que las exportaciones de armamento seguirán creciendo. Según apreciaciones de los ejecutivos de la Agencia Nacional Exportadora de Armas ("Rosoboronexport"), mientras estos años últimos la cartera de pedidos se mantuvo en el nivel de 15-16 mil millones de dólares, ahora ha alcanzado $23.000 millones, cifra comparable con la de la época soviética.
