Moscú, 18 de octubre, RIA Novosti. La denuncia que la prensa checa formuló contra un corresponsal de RIA Novosti ha resultado falsa, escribe hoy Rossiyskaya Gaceta.
El diario Mlada Fronta Dnes publicó el otro día, con fines obviamente sensacionalistas, la información de que un periodista ruso se dedicaba a las actividades de espionaje contra la República Checa. Los autores del artículo indicaban como culpable al corresponsal de RIA Novosti, Leonid Sviridov, habiendo olvidado averiguar, probablemente, que él trabaja en Varsovia desde 2003, y no en Praga.
La directora de RIA Novosti, Svetlana Mironiuk, ha enviado a Mlada Fronta Dnes una carta que califica de ‘absurdas' las acusaciones formuladas contra Sviridov y reprocha que los autores de la publicación hayan decidido recurrir a fuentes anónimas y ni siquiera se hayan tomando la molestia de llamar a la agencia o al personaje aludido para comprobar la información.
'Nuestra agencia y Leonid Sviridov, quien es un periodista profesional, no han participado ni piensan participar en juegos políticos ni de espionaje' - señala Mironiuk. Esta ejecutiva también repara en que ‘habría sido bastante incómodo espiar a políticos checos desde Varsovia' donde Sviridov trabaja desde 2003. A lo largo del presente año, este periodista ruso ha visitado la República Checa sólo en dos ocasiones, recuerda ella.
El propio Sviridov, en declaraciones a Rossiyskaya Gaceta, cuenta un detalle curioso: desde hace diez años él sigue recibiendo a diario, por correo electrónico, todas las notas de prensa desde la Oficina del Presidente de la República Checa. Ha sido así durante el gobierno anterior, de Vaclav Havel, y actualmente, con el nuevo presidente Vaclav Klaus. ‘Parece que ahí no me tienen por un espía' - observa Sviridov.
El famoso abogado y ex primer ministro eslovaco, Jan Czarnogurski, se ha encargado de la defensa de Sviridov y exigido ya que Mlada Fronta Dnes publique una desmentida, tal y como requiere la legislación local. También se pedirá una indemnización por el daño moral que, según Sviridov, será cuantiosa.
