"El día de la rotación, las Fuerzas Armadas de Ucrania abrieron fuego de artillería contra el territorio adyacente al recinto de la central nuclear de Zaporozhie", señala el comunicado de prensa oficial.
El documento tachó de "terrorista" a esa conducta, habida cuenta de que "pone en peligro a empleados del OIEA y a la población civil de Energodar", la ciudad más cercana a la central.
Actualmente, la planta sigue operando con normalidad, sin que se superen los niveles de radiación de fondo natural.
En octubre de 2022, tras la incorporación de la región de Zaporozhie a Rusia, la central pasó a ser propiedad de este país. Los seis reactores de la planta están apagados para minimizar el riesgo de su exposición al conflicto armado en curso.