La Unión Europea se inmola, según Orban
Orban recordó el Nuevo Acuerdo Europeo de Competitividad europeo alcanzado en noviembre del año pasado en Budapest. "Dijimos que había que reducir a toda costa los precios de la energía porque pagamos por el gas y la electricidad entre tres y cinco veces más que EEUU, con el que deberíamos competir, así que hay que bajar los precios a toda costa", señaló Orban a tiempo de admitir que los planes al respecto "no se cumplirán".
Y es que Hungría ha criticado en repetidas ocasiones la política energética de la UE y se expresa a favor de la recuperación de importaciones de hidrocarburos rusos. "Nos hemos aislado de la economía rusa, incluida la energía, lo que tendrá un impacto a largo plazo en nosotros también. Estamos perdiendo nuestra estrategia económica, que funcionaba bien, como base de la economía europea", explicó Orban.
Contrariamente a los postulados del líder húngaro, la Unión Europea está abierta a comprar más gas natural licuado [GNL] a EEUU. El aumento de las importaciones europeas de energía, incluido el petróleo fue una de las exigencias que el presidente de EEUU, Donald Trump, puso sobre la mesa para que el bloque comunitario pudiera sortear la subida de los aranceles prometida por el inquilino de la Casa Blanca.
"Esto es un cadáver", sentencia el Dr. Miguel Jaimes, director del Diplomado Internacional de Geopolítica del Petróleo, al referirse a la Unión Europea respecto al resultado de sus políticas energéticas de comprarle más GNL a EEUU, y de rechazar el gas barato ruso.
"El haber atado la producción de hidrocarburos y su consumo a las guerras, a los conflictos, a las amenazas, iba a traer —como en efecto llegamos— consecuencias muy graves", observa el analista.