"Las ventas de armas estadounidenses a la región china de Taiwán violan gravemente el principio de una sola China y los tres comunicados conjuntos chino-estadounidenses, especialmente el Comunicado del 17 de agosto de 1982, así como la soberanía y los intereses de seguridad de China", informó el Ministerio de Asuntos Exteriores del país asiático.
El pasado 30 de noviembre, el Departamento de Defensa estadounidense anunció que el Departamento de Estado había aprobado la venta de armas a Taiwán por valor de 385 millones de dólares.
De acuerdo con el Ministerio, la decisión de vender armas a Taiwán por parte del Gobierno de Joe Biden "es sencillamente incoherente con el compromiso de los líderes estadounidenses de no apoyar la 'independencia de Taiwán'".
"China lo deplora y se opone firmemente, y ha presentado serias protestas a Estados Unidos", señalaron las autoridades del país asiático.
El Ministerio de Asuntos Exteriores hizo también un llamado a Washington para que deje inmediatamente de armar a Taiwán y deje de instigar y apoyar a las fuerzas separatistas en la búsqueda de la independencia de la isla rebelde.
La venta de armas, que incluyen repuestos y equipos para aviones F-16, así como para sistemas de comunicaciones estratégicas, coincide con la primera gira internacional del presidente de Taiwán, Lai Ching-te, en la que visitará las Islas Marshall, Tuvalú y Palau, pero en la que hará "una parada" en Hawái.
En este sentido, Pekín dijo que se opone firmemente a cualquier forma de interacción oficial entre EEUU y la región de Taiwán, a cualquier viaje de dirigentes de las autoridades de Taiwán a EEUU en cualquier nombre o bajo cualquier pretexto, y a cualquier forma de connivencia o apoyo de EEUU a los “separatistas de la independencia de Taiwán” y a sus actividades.
"La cuestión de Taiwán está en el centro de los intereses fundamentales de China y es la primera línea roja que no puede cruzarse en las relaciones entre China y EEUU", afirmó el Ministerio.