Sudáfrica, basándose en la Convención sobre el Delito de Genocidio, presentó a finales de diciembre de 2023 una demanda judicial contra Israel en la Corte de la ONU, instándola a tomar medidas contra las autoridades israelíes. Las primeras audiencias se celebraron el 11 y el 12 de enero.
El 26 de enero, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ordenó a Israel que adoptara todas las medidas necesarias para impedir el genocidio en el enclave palestino y para proporcionar con urgencia la asistencia humanitaria a la Franja de Gaza.
El pasado 20 de mayo, el fiscal jefe de la CPI, Karim Khan, solicitó órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y otras autoridades del Estado hebreo por los presuntos crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos desde octubre de 2023. A su vez, Israel rechazó estas acusaciones y se negó a cooperar con la CPI.
Además, Khan pidió también órdenes de arresto contra tres líderes del movimiento palestino Hamás.
El 7 de octubre de 2023,
un ataque coordinado por Hamás contra más de 20 comunidades israelíes resultó en aproximadamente
1.200 fallecidos, alrededor de 5.500 heridos, y la captura de 253 rehenes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros.
En represalia, Israel lanzó una declaración de guerra contra Hamás y emprendió una serie de bombardeos sobre Gaza, que han dejado hasta el momento casi 43.800 muertos y más de 103.600 heridos.
Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a pactar un alto al fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.