Ildefonso Guajardo, el exsecretario de Economía de Mexico durante el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, dijo que el dueño de la empresa Tesla decidió pausar la fábrica de sus vehículos eléctricos por razones ajenas a la amenaza arancelaría del ahora presidente electo Donald Trump.
"Elon Musk traía un problema serio con su Consejo [de Administración] y utilizó muy bien este pretexto para desengancharse de su compromiso en México", comentó en entrevista con el diario mexicano Milenio.
Además, consideró que es complicado que el proyecto de la Gigafábrica planteada para México vaya a retomarse con Trump en la presidencia.
"Dudo que ese proyecto vaya a retomarse por las características que estamos observando, y porque, de alguna manera, si gana Trump no le va a ser favorable esa acción", dijo Guajardo poco antes de que se conocieran los resultados electorales de Estados Unidos.
Musk anunció el pasado 23 de julio que la construcción de la fábrica de autos Tesla en México estaría en pausa hasta después de los comicios estadounidenses. Durante una teleconferencia organizada por la empresa de autos eléctricos, el multimillonario explicó que esperarán a que pase el periodo electoral para seguir con el proyecto de la llamada gigafábrica.
"Actualmente, estamos en pausa", respondió Musk a cuestionamientos sobre el estado del plan de Tesla para construir su planta en el estado de Nuevo León (norte). "Creo que necesitamos ver justo dónde están las cosas después de las elecciones”, agregó.
El empresario estadounidense abundó en las razones para la pausa en la construcción de la fábrica, y expresó que se debía a que el entonces candidato presidencial republicano Donald Trump planteó cobrar aranceles a los vehículos fabricados en México.
"Creo que tenemos que ver lo que pasa con la elección. Trump ha dicho que pondrá aranceles a los vehículos producidos en México. Así que no tiene sentido invertir mucho en México si eso va a pasar", declaró.
En 2023, Tesla anunció la construcción de una planta para la fabricación de sus autos eléctricos en México, que se esperaba comenzara a operar en 2026. El anuncio contó con el beneplácito del expresidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y del gobernador del estado, Samuel García.
Según los planes iniciales, la fábrica iba a construirse en el municipio de Santa Catarina, en un terreno de 261 hectáreas, y se esperaba que tuviera una inversión inicial de 1.000 millones de dólares, que podría aumentar a 5.000 millones de dólares.
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