"El número de muertos por los ataques aéreos israelíes contra los suburbios del sur se incrementó a 50", indica el comunicado, agregando que otras 11 personas se consideran desaparecidas.
Mientras, en la escena del bombardeo continúa por tercer día una operación de búsqueda y rescate de debajo de los escombros, igualmente se llevan a cabo las pruebas forenses para identificar a todas las víctimas.
El 20 de septiembre, Israel mató a los principales comandantes de la organización, Ibrahim Aqil y Ahmed Wahbi, junto con otros altos cargos del grupo, en un ataque aéreo contra un edificio residencial en Beirut. Murieron 45 personas en la explosión. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirmaron que Aqil estaba ultimando una operación planificada para invadir Galilea.
El ataque se produjo después de que 30 miembros de Hizbulá murieran en explosiones de bíperes en El Líbano. El ataque se atribuyó a Israel, que no ha hecho comentarios al respecto.