"Se habla de una segunda ola de estallidos en walkie-talkies, baterías de litio y en celulares en lugares de Siria y el Líbano. Las explosiones se dieron de manera simultánea"; aseguró a Séptimo piso Roxana Levinson, analista experta en temas de Oriente Medio desde Israel.
"Israel no asume ninguna responsabilidad. Pero a su vez, el ministro de Defensa, Yoav Galant dijo que están entrando en una nueva fase de la guerra, lo cual no es una manera de asumir la responsabilidad, sino que es una forma de cubrir sus propias falencias. La mayoría de la gente está molesta con el Gobierno por los 11 meses de ataques. Ven lo sucedido en el Líbano como algo impactante, pero no entienden la estrategia y cómo puede ayudar a que los habitantes del norte del país puedan volver a sus casas", agregó.
Hizbulá y su líder Hasán Nasralá "fueron humillados y ahora van a responder contra Israel. Van a tratar de reorganizarse y encontrar una nueva manera de comunicarse", comentó.
"En la calle hay temor por la respuesta del Líbano y de Irán, ya que el embajador Mojtaba Amani, también fue herido. Están esperando instrucciones para preparar los refugios porque tienen asumido que va a pasar algo", destacó.
"Ni Israel ni Hizbulá quieren ir a una guerra"
"La nueva estrategia de Israel podría responder a tres puntos: fomentar el principio de una guerra, tratar de evitar un conflicto o la tercera es que hayan estado a punto de ser descubiertos. La gran pregunta es ¿Por qué ahora? Creo que la estrategia máxima es humillar y tratar de inmovilizar", aseguró a Séptimo piso Ezequiel Kopel, periodista especializado en Oriente Medio.
Según Kopel, puede haber un llamado a responder de alguna manera. "Todo puede pasar, pero creo que ninguno quiere ir a un conflicto bélico, ya que de ambos lados prefieren acciones de alto perfil, lo cual no significa una guerra", concluyó.