"En relación con los incendios naturales que han arrasado varias regiones brasileñas, Vladímir Putin se mostró dispuesto a ayudar a superar las consecuencias de la catástrofe, si fuera necesario", indica el comunicado.
Brasil vive una ola de incendios histórica en medio de la peor sequía en siete décadas. Según la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, el 60% del territorio brasileño está bajo riesgo de incendios forestales debido a la sequía.
Silva admitió que las medidas tomadas hasta el momento "no han sido suficientes" y que se están movilizando medios y aumentando los recursos diariamente, pero, al citar que también hay incendios en Bolivia, Perú y Paraguay, afirmó que la situación en Brasil se agrava por el negacionismo climático.
La ministra recordó que la mayoría de los incendios forestales son provocados —la Policía Federal tiene 52 investigaciones en marcha— y pidió que los parlamentarios voten a favor del proyecto de ley que eleva las penas para los pirómanos.
En la actualidad, es difícil que alguien que provoca un incendio acabe tras las rejas: las penas varían entre los dos y los cuatro años de cárcel, y normalmente se cambian por penas alternativas, como multas o servicios a la comunidad.