"Alguien debería, al menos, asegurarse de que no se repiten las sanciones. De lo contrario, ya han empezado una segunda ronda con RT", agregó.
Horas antes, Blinken acusó a
RT de tener
"capacidades cibernéticas" y dirigir "operaciones encubiertas" para interferir en asuntos de otros países e incluso en sus "adquisiciones militares". Por ese motivo, Washington impuso
nuevas sanciones contra RT y el grupo mediático matriz de
Sputnik, Rossiya Segodnya.
El Departamento del Tesoro fijó un plazo a las empresas estadounidenses para liquidar y poner fin a todas las relaciones financieras con este grupo mediático antes del 13 de noviembre.
Washington anunció la semana pasada
una serie de sanciones y otras medidas —que son independientes a las dadas a conocer este 13 de septiembre— contra
medios rusos, debido a supuestos intentos de interferir en la política y las elecciones de esa nación norteamericana.
RT respondió, en tono de broma, que se estaba "quedando sin palomitas" para ver qué será lo próximo que se le ocurrirá a Estados Unidos sobre ellos.
En aquella ocasión, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia advirtió que Moscú respondería a las medidas, y aseguró que Washington busca "esterilizar" el espacio informativo nacional y global de cualquier forma de disidencia.
La cadena rusa RT dio una respuesta irónica a las acciones norteamericanas de censura, al sugerir que se encontraba transmitiendo desde un "cuartel general".
Por su parte, la redactora jefa de Sputnik y del grupo mediático Rossiya Segodnya, Margarita Simonián, recordó las emblemáticas palabras del expresidente estadounidense John F. Kennedy: "No tememos confiar al pueblo estadounidense hechos desagradables, ideas ajenas, filosofías extrañas y valores competitivos. Porque una nación que teme dejar que su pueblo juzgue la verdad y la falsedad en un mercado abierto, es una nación que teme a su pueblo", declaró, citando al político asesinado en 1963.
"No lo asesinaron por nada: él pensaba de forma equivocada", agregó Simonián.