Fue el mismo Buró Federal de Investigaciones de EEUU (FBI, por sus siglas en inglés) el que identificó a Crooks como el responsable del atentado contra el aspirante presidencial republicano. Si bien Trump resultó solamente con una lesión leve en la oreja derecha, un asistente al evento murió, mientras que otro resultó herido de gravedad. El tirador fue abatido por elementos del Servicio Secreto estadounidense.
De acuerdo con CNN, Thomas Matthew Crooks era un joven de 20 años originario de Bethel Park, en Pittsburgh, en donde vivía y trabajaba como asistente en un asilo de ancianos.
El arma que utilizó el joven de 21 años en septiembre, fue un rifle semiautomático tipo AR, el cual fue rastreado, por lo cual se comprobó que el padre del atacante era el dueño legal del arma.
Según información del FBI citada por varios medios, Crooks actuó de forma solitaria en el intento de magnicidio contra Trump y hasta el momento no se tiene claro el móvil del ataque.
Crooks, detalla CNN, estaba registrado como republicano y no tenía antecedentes penales, además de que durante la secundaria fue un estudiante destacado, aunque, según testimonios, solitario y víctima de acoso.
NBC apunta que la familia del atacante, quien se cree disparó al menos ocho veces antes de ser neutralizado, está cooperando con las autoridades en las investigaciones sobre los hechos ocurridos este 13 de julio en Butler.
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