El magnate republicano ha hecho de los nuevos aranceles una pieza central de su potencial regreso a la Casa Blanca.
"Los aumentos agresivos de aranceles bajo una posible segunda presidencia de Donald Trump probablemente resultarían en una reducción de la producción estadounidense y mundial en comparación con un escenario base ilustrativo sin más aumentos", señala el informe.
La agencia crediticia estimó el impacto en la economía mundial de una nueva guerra comercial a través de una serie de simulaciones macroeconómicas, utilizando como base el
Modelo Económico Global de Oxford Economics. En los escenarios en los que los aranceles aumentan agresivamente,
EEUU vería golpes a corto plazo de entre el 0,4% y el 0,8% de su producto interno bruto (PIB), según el informe.
"Si los socios comerciales de EEUU toman represalias con subidas arancelarias propias, el impacto sería mayor —hasta el 1,1%— y más persistente", señala Fitch.
A su vez, alerta que aranceles más altos "supondrían un aumento de la inflación de hasta 0,4 puntos porcentuales, pero solo a corto plazo".
"A mediano plazo, el impacto sobre la inflación sería negativo, ya que una demanda más débil se traduce en una relajación de las presiones sobre los precios", añade el reporte.
China, y en particular Canadá y México, podrían sufrir los mayores impactos sobre el PIB, con una media del 1,8% en el peor de los escenarios.
La mayor parte de las medidas políticas de Trump
se centraron entonces en China, recuerda la calificadora.
Finalmente, señala que la investigación sobre las repercusiones de las subidas arancelarias de la presidencia de Trump en la economía estadounidense concluye que los efectos generales fueron adversos, con caídas modestas del PIB y el empleo, y un aumento de los precios.