"Ya hay 22 investigaciones en marcha. Las detenciones se han realizado hace unas horas y, obviamente, se dictarán condenas", afirmó el ministro a la radioemisora RTL.
El titular francés señaló que la mayoría de los mensajes fueron recibidos de menores, "bromistas que no se dan cuenta de las consecuencias extremadamente dramáticas" de sus acciones. Para combatir este tipo de situaciones es necesario perseguir a los infractores y llevarlos ante la justicia, según Dupond-Moretti.
Además, el ministro recalcó que estas acciones irresponsables "causan una psicosis que el país no necesita" y distraen a las fuerzas del orden de sus responsabilidades en materia de seguridad.
Últimamente, en Francia se han vuelto más frecuentes los mensajes sobre bombas y amenazas de ataques terroristas.
Más temprano este viernes, el ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, anunció que la policía francesa detuvo a 250 personas durante la semana pasada en el marco de la lucha contra la amenaza del terrorismo en el país.
El pasado 13 de octubre, un joven de 20 años que gritó "¡Allahu akbar!" atacó con un arma blanca a varias personas en una escuela secundaria de la ciudad francesa de Arras y fue detenido por la policía. El ataque dejó un profesor muerto y tres personas heridas de gravedad.
La oficina del primer ministro de Francia comunicó que tras el ataque en el país fue introducido el nivel máximo de amenaza terrorista.
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