"Según la información telemétrica recibida, el servicio y los sistemas embarcados de Luna-25 funcionan con normalidad. La comunicación con la estación es estable y constante. El grupo de control se encuentra operando en modo normal", indica el comunicado.
Rusia lanzó en la noche del 10 agosto al 11 de agosto su primera sonda lunar en casi medio siglo, Luna-25, pues la anterior misión, Luna-24, fue lanzada en los tiempos de la Unión Soviética, en 1976.
El cohete portador Soyuz-2.1b despegó desde el cosmódromo de Vostochni, en el Lejano Oriente, a las 2.11 hora de Moscú (GMT+3) y en menos de una hora y media, se situó en la trayectoria de vuelo a la Luna.
Dentro de unos cuatro días y medio, la sonda alcanzará la órbita lunar y varios días más tarde finalmente realizará el aterrizaje cerca del polo sur de la Luna para comenzar con la investigación que se prolongará por un año.
Luna-25 será la primera estación en realizar un alunizaje suave en la región circumpolar, donde el terreno es difícil, pues todos sus predecesores aterrizaron en la zona ecuatorial del satélite terrestre.
Los principales objetivos de la misión son perfeccionar las tecnologías de aterrizaje suave en zonas polares de la Luna y realizar una exploración del área designada cerca del polo sur del satélite natural de la Tierra.
En 2027, Rusia planea realizar el lanzamiento del orbitador Luna-26; para 2028 se prevé la misión de la sonda Luna-27 que debe aterrizar en una zona que acogería en el futuro una base lunar para investigar el permafrost polar.
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