"Sí, puedo", afirmó el funcionario en una audiencia ante la Cámara de Representantes cuando se le pregutnó si podía garantizarle al mundo que ninguna agencia estadounidense estuvo involucrada con el sabotaje.
El pasado 26 de septiembre, la empresa Nord Stream 2 AG, operadora del gasoducto homónimo ruso, informó de una fuga de gas provocada por causas desconocidas en una de las dos tuberías de la infraestructura cerca de la isla danesa de Bornholm. Más tarde trascendió que las dos líneas del gasoducto paralelo Nord Stream 1 también habían sido dañadas.
El Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia catalogó las explosiones de ataques terroristas y el 30 de septiembre desveló la posesión de evidencias que apuntaban a la implicación de determinados países occidentales. La Fiscalía General rusa abrió una investigación por terrorismo internacional tras los daños a las dos tuberías en una zona del mar Báltico.
Una investigación periodística realizada por Hersh reveló que buzos militares de EEUU colocaron las cargas explosivas bajo los gasoductos en junio de 2022, y tres meses después los militares noruegos activaron los explosivos.
Diálogo con Rusia pero con una condición...
EEUU hubiera aprovechado de inmediato la oportunidad de discutir con Rusia una solución diplomática al conflicto en Ucrania si hubiera visto que Moscú estaba listo para esas negociaciones, destacó Blinken.
"Si hubiéramos visto algún indicio de que Rusia estaba lista y preparada para una diplomacia significativa para poner fin a esta agresión, hubiéramos accedido" al diálogo, profundizó.
Lamentablemente, prosiguió, "lo que hemos visto hasta la fecha es la absoluta ausencia de esa evidencia".
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les preste ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.
Salida de Cuba de lista de Estados patrocinadores del terrorismo
El Gobierno de EEUU no planea sacar a Cuba de su lista de Estados patrocinadores del terrorismo, resaltó Blinken.
"No estamos planeando sacarlos [a Cuba] de la lista", comentó el funcionario, cuando se le preguntó si Washington planeaba hacerlo.