"No aplicamos una política de sanciones contra quienes nos protegieron en 2015 [el veto de Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU a la resolución del Reino Unido sobre el genocidio de Srebrenica] y ayudaron a mantener la integridad territorial de nuestro país", dijo, citado por la agencia Tanjug.
Según el mandatario, "podemos renunciar a esto en caso de que tengamos la espada de Damocles sobre nuestra cabeza", e indicó que, de momento, no ve esa amenaza, pero, si surge, informará en persona a sus ciudadanos.
Este jueves 10, Vucic arribó a Francia y se reunió con su homólogo francés, Emmanuel Macron, al margen del Foro de Paz de París.
Al término de esta reunión a puerta cerrada, el líder del país balcánico comentó a los periodistas que las conclusiones del Consejo de Seguridad Nacional de Serbia de apoyar la integridad territorial de Ucrania y de negarse a imponer sanciones a Rusia habían "resistido 270 días de la presión más severa de la historia moderna serbia".
Para el viernes 11, están previstos encuentros de Vucic con el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, y el representante de la UE para el diálogo de Belgrado y Pristina, Miroslav Lajcak.
Numerosos países condenaron la operación militar especial que Rusia lanzó en Ucrania el pasado 24 de febrero y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales con la intención de infligirle a la economía rusa el mayor daño posible para presionar a Moscú a detener las hostilidades.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró previamente que la política de contención y debilitamiento de Rusia forma parte de la estrategia occidental a largo plazo, y las sanciones aprobadas por Occidente y sus aliados ya asestaron un serio golpe a toda la economía mundial.
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