La representación permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, encabezada por Vasíli Nebenzia, acusó en una reunión del Consejo de Seguridad que los intereses estadounidenses en crecer su suministro de gas tendrían altos beneficios ante fallas en el funcionamiento del Nord Stream, que traslada combustible ruso a Europa.
El propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, consideró que las averías registradas en el gasoducto son un acto deliberado de sabotaje y ofreció cooperación de su país para investigar los hechos.
La titular de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, reconoció que Washington aseguró que trabajaría con sus aliados para evitar que entrara en operaciones el Nord Stream 2, pero deslindó al país de los ataques contra el gasoducto, ocurridos en un momento de aumento de las hostilidades occidentales frente a Rusia y a los que el Kremlin consideró actos terroristas.
30 de septiembre 2022, 21:15 GMT
El coronel Macgregor, exfuncionario del Pentágono entrevistado con Sputnik, consideró ilógico el deslinde estadounidense dadas los antecedentes, donde además la interrupción de suministro gasífero ha forzado a Alemania en el corto plazo a situarse en una posición de mayor dependencia energética frente a Estados Unidos. Esto, agregó, arroja luz sobre quien se beneficia de la destrucción del gasoducto.
"Hasta donde entiendo, la investigación continúa por nuestros aliados europeos en la región. Hasta donde sé, no hemos sido solicitados para ofrecer ninguna capacidad específica por el momento", apuntó.
La vocería del Kremlin, a cargo de Dmítri Peskov, señaló que se mantiene incierta la posibilidad de colaboración para restaurar el Nord Stream toda vez que Occidente ha adoptado una posición histéricamente antagónica contra Rusia.
30 de septiembre 2022, 08:34 GMT
En contra de la narrativa occidental
El economista Jeffrey Sachs consideró en diálogo con Bloomberg TV que Polonia y Estados Unidos estarían detrás de las averías al gasoducto, ubicado en el mar Báltico.
"Muchos en el mundo están viendo estos eventos con horror. Ven esto como un horrible choque entre Rusia y Estados Unidos. No lo ven, como hacemos en los medios de comunicación, como un ataque no provocado de Rusia contra Ucrania. Muchos en el mundo no lo ven de la manera en que lo describimos. Muchos en el mundo simplemente están aterrados, honestamente", apuntó.
En un momento en que la economía europea está siendo fuertemente golpeada por los cortes energéticos, la destrucción del gasoducto lo haría definitivo, añadió el economista y especuló sobre la responsabilidad de Varsovia y Washington.
"Sé que esto va en contra de nuestra narrativa, tú no tienes permitido decir esas cosas en Occidente, pero los hechos del asunto son que alrededor del mundo, cuando hablo con las personas, piensan que Estados Unidos lo hizo", incluso entre periodistas que no manejan esa versión en sus análisis y trabajo, indicó Sachs.
Para sustentar su sospecha de que Estados Unidos está detrás del sabotaje, el economista aseveró que helicópteros militares norteamericanos con base en la ciudad polaca de Danzig se encontraron rodeando el área de las fugas, además de las declaraciones previas de Biden.
También señaló al titular del Departamento de Estado de la Administración Biden, Antony Blinken, por afirmar que la situación del Nord Stream es una oportunidad tremenda. "Esa es una manera extraña de hablar si estás preocupado acerca de un acto de piratería en infraestructura internacional de relevancia vital", calificó el economista.
29 de septiembre 2022, 07:18 GMT
Además, señaló que la situación geopolítica se complica para Estados Unidos porque el frente ucraniano no es el mayor de sus problemas, donde también ha escalado la hostilidad contra China.
"De nuevo, con una enorme cantidad de provocación proveniente desde el lado estadounidense, así que que estamos rompiendo cualquier sentido de estabilidad ahora mismo", consideró y agregó que este panorama se suman las agitaciones intestinas de Europa.
"Así que estamos entrando a la era geopolítica más inestable en décadas, estamos entrando a la primera hiperinflación en más de 40 años, y estamos entrando a la primera escalada del precipicio nuclear en 60 años", luego de la crisis de los misiles de Cuba, que llevó al borde de la confrontación nuclear a Estados Unidos con la entonces Unión Soviética.