La Organización Meteorológica Mundial (OMM) advirtió que el mundo atraviesa el primer episodio triple de La Niña en lo que va del siglo XXI, ya que el fenómeno meteorológico se cumplió durante tres inviernos consecutivos del hemisferio norte —veranos en el hemisferio su—.
El fenómeno climático, que altera las temperaturas, las precipitaciones y produce sequías e inundaciones, podría continuar hasta fin de año e incluso hasta inicios de 2023. Su reiteración de forma consecutiva desde septiembre de 2020, constituye, según los expertos, un "evento excepcional".
Para la OMM, existe 70% de probabilidad de que La Niña abarque el período de septiembre a noviembre y 55% desde diciembre de 2022 a febrero de 2023.
De acuerdo al Secretario General de la OMM, Jukka Petteri Taalas, "la agudización de la sequía en el Cuerno de África y en la parte meridional de América del Sur lleva el sello de La Niña, al igual que las precipitaciones por encima de la media observadas en el sureste asiático y en Australasia".
En efecto, las previsiones acerca de La Niña confirman la ocurrencia de sequías que, según la OMM, pueden ser "devastadoras", principalmente en África Oriental.
Sin embargo, también se esperan efectos que pueden ser negativos en Sudamérica.
La cátedra de Climatología y Fenología Agrícolas de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) subrayó que en Argentina la situación de sequía se complejiza al norte y oeste de la Región Pampeana, al sur del litoral y en el nordeste y noroeste del país.
De acuerdo al informe publicado por la institución a inicios septiembre, el invierno austral de 2022 es considerado "uno de los más secos de los últimos tiempos", lo que genera un déficit de agua en los suelos y esto ya ha condicionado la siembra tanto de maíz en la Región Pampeana, así como la de girasol en la región Chaqueña.
El país no solo sufrirá la escasez de lluvias, sino también el aumento de la temperatura, otra de las consecuencias del fenómeno La Niña.
María Elena Fernández Long, una de las coautoras del informe, explicó al medio Argentina Forestal que "para el trimestre septiembre, octubre y noviembre se registrarán precipitaciones inferiores a las normales en gran parte del territorio nacional".
En Brasil, en tanto, el Instituto de Meteorología brasileño ya había advertido que durante el invierno el fenómeno climático afectaría la zona más productiva del país.
Según los modelos metereológicos y de acuerdo a declaraciones del meteorólogo brasileño Mozar de Araújo Salvador, La Niña seguirá actuando en primavera, provocando lluvias irregulares en el extremo sur de Brasil y teniendo impactos en la ganadería y la agricultura.
Estos sectores pueden verse afectados por el "exceso de calor, que suele ir acompañado por falta de lluvias", pronosticó el experto, agregando que se genera "un doble efecto en el ambiente" que tendrá implicancias económicas.
En Uruguay, las precipitaciones estarán por debajo de lo normal por lo que se puede esperar un déficit hídrico, principalmente en el suroeste y este del país. Al igual que en la región, las temperaturas se mantendrán más elevadas que la media.
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