Las empresas extranjeras no tienen por qué preocuparse, "la iniciativa establece que se les garantiza el 46% del mercado y la CFE se encargaría de la generación del 54%".
El jefe de Estado respondió así a una declaración del embajador de EEUU en México, Ken Salazar, quien pidió el 24 de marzo "que se respeten los contratos, los acuerdos que se han hecho con las leyes que existían, pues [las empresas extranjeras] han invertido, porque si no hay confianza no va a haber inversión, y necesitamos inversión".
López Obrador confió en que el debate del proyecto para una nueva ley que envió en febrero del año pasado al Congreso, culmine el proceso legislativo en abril próximo, y sea respaldado por una mayoría calificada requerida, dos terceras partes de votos en ambas cámaras del Poder Legislativo, aunque el oficialismo solo tiene mayoría simple, de la mitad más uno de los asientos.
El jefe de Estado dijo que el 46% del mercado mexicano destinado al sector privado "equivale a todo lo que consume Argentina".
Por otra parte, indicó que es necesario "que la CFE tenga más presencia, ya no el 100% como era antes, porque ahora con todas las reformas [2013] está limitado".
López Obrador considera que reducir la porción de la empresa estatal en el mercado eléctrico sería muy grave para los intereses de los ciudadanos y la nación.
"Es necesario fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad, porque durante el periodo neoliberal se buscó destruirla, para privatizar la industria eléctrica y darle el negocio de la energía a las empresas nacionales y extranjeras", argumentó.
El mandatario indicó que el papel de esas firmas privadas comenzó desde el mandato de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), cuando comenzaron a recibir permisos, hasta la reforma energética de 2013, cuando "prácticamente, entregaron todo el mercado a las empresas".
"Respeto mucho al embajador de EEUU en México, respeto su opinión, pero nosotros tenemos una postura que vamos a defender y los legisladores son los que van a decidir", puntualizó.
Recordó que otra parte de la reforma a la Constitución establece que el litio, mineral estratégico utilizado para fabricación de baterías, quedaría bajo el dominio de la nación y su explotación no podrá ser concesionada a extranjeros.
A finales de en enero pasado, la secretaria de Energía de EEUU, Jennifer M. Granholm, expresó en el marco de una visita a México sus "preocupaciones reales" por el posible impacto negativo del proyecto de reforma de las leyes del sector eléctrico mexicano.
"En cada reunión, expresamos las preocupaciones reales sobre el posible impacto negativo de las reformas energéticas propuestas por México sobre la inversión privada estadounidense", dijo la alta funcionaria estadounidense al final de su visita.
Las empresas de EEUU, Canadá y Europa, han invertido en los últimos años unos 44.000 millones de dólares en parques generadores de energías verdes, utilizando viento y luz solar.
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