"Putin en este momento tiene todo el fundamento para no considerar al presidente Zelenski como una persona que está dispuesta, puede o quiere cumplir el conjunto de medidas de Minsk", dijo Peskov en una entrevista para el canal Rossiya 1.
Según el portavoz, "si se estudian en conjunto todas las declaraciones de Zelenski, se deduce que: a) no puede, b) no quiere y c) no va a hacerlo".
"Ucrania y el señor Zelenski, declaran que el debate sobre la solución en el sureste [de Ucrania] es el objetivo principal. Pero nosotros no somos parte del conflicto. Y la situación en el sureste debe discutirse entre el presidente Zelenski y los representantes de esa región", subrayó Peskov, agregando que Kiev "no quiere entenderlo".
Al comentar las acusaciones de la parte ucraniana de que el Kremlin no contesta a las llamadas telefónicas, el portavoz aseguró que Kiev tampoco responde a la pregunta de "¿qué es lo que ustedes proponen discutir?".
"Tampoco escuchamos ninguna declaración que exhorte a Kiev a moderarse. Ninguna. Ni la OTAN, ni las capitales europeas, ni Washington instan a Kiev a tener cuidado, a la cautela. Todo eso es como si no existiera. Por supuesto, esa posición difícilmente se puede llamar, bueno, ni siquiera adecuada", resaltó el funcionario.
20 de febrero 2022, 11:35 GMT
"Kiev solo imita el proceso de negociaciones"
Putin, en una conversación con su par francés, Emmanuel Macron, celebrada este 20 de febrero aseguró que Kiev solo imita el proceso de negociaciones, pero se niega obstinadamente a cumplir los Acuerdos de Minsk, informó el servicio de prensa del Kremlin.
"Una vez más, se subrayó que Kiev solo imita el proceso de negociaciones, se niega obstinadamente a plasmar los Acuerdos de Minsk alcanzados en el formato de Normandía", indica el mensaje.
Ambos mandatarios expresaron su preocupación ante el actual agravamiento de la situación en el sureste de Ucrania, y el mandatario ruso "indicó que la causa de la escalada de las tensiones son las provocaciones de las Fuerzas de Seguridad ucranianas".
"Tomando en cuenta la gravedad de la situación actual, los presidentes reconocieron que era aconsejable fomentar la búsqueda de soluciones por vías diplomáticas, a través de los Ministerios de Exteriores y los asesores políticos de los líderes de los países participantes en el formato de Normandía", resalta el comunicado.
Según el mensaje, Putin además destacó nuevamente "la necesidad de que EEUU y la OTAN perciban con toda la seriedad posible las exigencias de Rusia relacionadas con las garantías de seguridad, y reaccionen de una manera concreta y sustancial a las mismas".
El conflicto armado en el este de Ucrania entró en una fase de escalada en la segunda quincena de febrero.
Los militares ucranianos denunciaron un drástico aumento de las infracciones del armisticio por parte de las milicias prorrusas de Donbás.
A su vez, las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) acusaron a Kiev de bombardear su territorio con armas pesadas, en flagrante violación de los Acuerdos de Minsk y las medidas adicionales pactadas para reforzar el alto el fuego.
El uso de la artillería pesada por parte de Kiev, según las repúblicas rebeldes, apunta a los preparativos para una solución militar del conflicto.
En este contexto, los líderes de Donetsk y de Lugansk anunciaron la evacuación de niños, mujeres y ancianos ante una posible ofensiva del Ejército ucraniano y decretaron la movilización general.
El ministro de Defensa de Ucrania, Alexéi Réznikov, negó los planes de una ofensiva en Donbás y aseguró que Kiev aboga por una solución política del conflicto.
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en Donbás, donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en respuesta al violento cambio de gobierno ocurrido en febrero del mismo año.
20 de febrero 2022, 14:47 GMT
Los Acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política al conflicto, pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia.
Las hostilidades han dejado hasta la fecha más de 14.000 muertos, según estimaciones de la ONU.