Recientemente, el Parlamento francés aprobó un cambio del antiguo pase sanitario, convirtiéndolo en un pase de vacunación para los mayores de 16 años.
El nuevo documento se expide únicamente a personas vacunadas contra el coronavirus, a diferencia del pase sanitario que también se otorgaba a los que tuvieran una prueba negativa de COVID-19 o a quienes hubiesen pasado la enfermedad recientemente.
El sistema excluirá el acceso de los no vacunados a las actividades de ocio, restaurantes, recintos deportivos, ferias y otros lugares.
Los activistas también llaman a manifestarse por la justicia económica y fiscal, y contra las reformas de las pensiones y el desempleo.