"La decisión fue adoptada mediante la Segunda Resolución del 28 de enero de 2022, en atención a lo establecido en el artículo 62 de la Ley número 183-02 Monetaria y Financiera del 21 de noviembre de 2002, relativo a las causas de disolución", explicó la Superintendencia de Bancos (SB) mediante un comunicado.
Como parte del plan de regularización, la SB le requirió a Bancamérica retornar depósitos mantenidos en entidades vinculadas en el exterior, aumentar el capital y fortalecer sus métodos de cobranza y controles internos.
Durante la vigencia del plan se mantuvo una estrecha vigilancia de la entidad y sus operaciones, incluida la presencia de supervisores especiales, añadió la SB.
"[Bancamérica] no subsanó el incumplimiento principal, relativo a la repatriación de los depósitos mantenidos en una [entidad] vinculada extranjera, ni aportó capital adicional", informó la SB.
El banco fijado para disolución registra activos ascendentes a 3.577 millones de pesos dominicanos (unos 62 millones de dólares aproximadamente), el 0,13% de los activos totales del sistema, que lo colocan en la posición número 31 entre las 49 entidades dominicanas de intermediación financiera.
Sus 28.485 depositantes representan el 0,34% del sistema, y sus 5.438 deudores el 0,27.
La SB procurará que el proceso de disolución se avenga a los protocolos reglamentarios, por lo cual activos y pasivos (créditos y depósitos) de Bancamérica deberán ser transferidos a otra entidad de intermediación financiera mediante un proceso de licitación transparente y competitivo, dentro de los próximos 30 días.
Bancamérica fue constituida en 2015 como parte del Grupo Financiero BOD, integrado además el Allbank de Panamá, cuyo accionista mayoritario era el banquero de nacionalidad venezolana, Víctor Vargas, actualmente prófugo de la justicia panameña.
Alrededor de 1990 Vargas tuvo inconvenientes con la Reserva Federal de Estados Unidos por la compra del Capital National Bank de Nueva York, dos de sus socios terminaron en prisión y él pactó su absolución con la condición de pagar una multa de 1.150.000 millones de dólares y de no volver a abrir un banco en ese país, recordó recientemente el diario estadounidense The Wall Street Journal.
La investigación periodística Papeles de Pandora le atribuye la propiedad de la villa La Serenísima, en el complejo turístico Casa de Campo, en La Romana (sureste), por la que acordó pagar 44 millones de dólares.