"Tenemos las 'puertas abiertas', para que el Gobierno salvadoreño se incorpore a conversar con nosotros y le podemos explicar sobre qué bases jurídicas-legales, partiendo del fallo de la Corte [Internacional de Justicia], es que llegamos a ese acuerdo", afirmó Ortega tras destacar la presencia del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández en la ceremonia de su juramentación presidencial el 10 de enero en Managua.
Antes de asistir a la toma de posesión de Ortega, el presidente de Honduras lamentó, por su red social en Twitter, que El Salvador rechazara el acuerdo limítrofe, según costa en un comunicado del 13 de diciembre pasado.
"Mi Gobierno ha trabajado por la paz y el desarrollo en torno al golfo de Fonseca. Alentamos a El Salvador a apoyar el tratado Bicentenario firmado por Honduras y Nicaragua - en lugar de duplicar su Ejército, adquirir nuevas armas, y tratar de dividir a sus vecinos", escribió Hernández.
El golfo de Fonseca es una entrada de agua natural de 3.200 kilómetros cuadrados, localizado en el Pacífico centroamericano, cuya jurisdicción comparten las tres naciones por mandato de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, de acuerdo a la resolución de 1992.
Viejas disputas por la soberanía de la Isla Conejo, ubicada cerca de las costas de El Salvador y Honduras, han impedido que sus Gobiernos avancen en la delimitación de las aguas compartidas.
No obstante, el presidente Ortega, consideró que escucharán a El Salvador, aunque su Gobierno "contravenga" lo acordado con Honduras.
"Los vamos a escuchar, estamos dispuestos a escucharlo, a tomar en cuenta sus inquietudes o si tienen razonamientos jurídicos fuertes que nos convenzan, que contravengan lo que hemos hecho, porque aquí lo que hemos hecho es cumplir lo que manda la CIJ", externó el mandatario.
Recordó que el acuerdo con Honduras tiene como objetivo desarrollar la paz y estabilidad en el golfo.
"La Corte lo que mandó fue [que] nos pusiéramos de acuerdo nosotros [países], que negociáramos nosotros y eso es lo que hicimos e invitamos a El Salvador que participara, pero no aceptó, ni siquiera aceptó el acuerdo que habíamos firmado para desarrollar el golfo de Fonseca como una zona de paz, una zona económica, una zona de libre comercio, porque es realmente un tesoro que tenemos aquí para sacar de la pobreza a nuestros pueblos", sentenció Ortega.
El presidente Hernández recordó que la sentencia de La Haya ratifica el derecho que tiene Honduras de salida al Pacífico a través del golfo de Fonseca.
Considerado uno de los mejores puertos naturales del mundo, el golfo de Fonseca, es un entrante protegido del océano Pacífico, está localizado al oeste de Centroamérica, limita al noroeste con El Salvador, al noreste y este con Honduras y al sur con Nicaragua.