"Todo esto va acompañado de estimulantes ejercicios no planeados de la OTAN (...). Todo esto nos preocupa profundamente porque sucede en las inmediaciones de nuestras fronteras", resaltó Peskov.
Al mismo tiempo, el funcionario subrayó que Rusia "no puede tomar medida alguna de distensión".
Rusia está muy alarmada ante la concentración de fuerzas armadas ucranianas en la zona de Donbás, declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
"Hemos visto informes de que más de 120.000 soldados se desplegaron en la zona de conflicto. Justo esto es lo que nos suscita temores de que en Kiev puedan prevalecer las voces a favor de una solución militar en Donbás", dijo Peskov ante la prensa.
El representante del Kremlin calificó el despliegue de tropas ucranianas en Donbás de "una aventura muy peligrosa".
"Todo esto va acompañado de estimulantes ejercicios no planeados de la OTAN (...). Todo esto nos preocupa profundamente porque sucede en las inmediaciones de nuestras fronteras", resaltó Peskov.
Al mismo tiempo, el funcionario subrayó que Rusia "no puede tomar medida alguna de distensión".
Asimismo, el portavoz reiteró que la guerra en Donbás es una guerra civil ucraniana de la que Rusia no forma parte.
"La guerra de Donbás es interna de Ucrania. Tenemos conocimiento de los intentos de presentar a Rusia como un participante de este conflicto. Esto no es así. Parar la guerra en Donbás solo se puede mediante negociaciones de ucranianos con ucranianos, [porque] es una guerra civil que fue provocada por los acontecimientos de 2014 y Rusia no forma parte de ella", enfatizó Peskov.
Al mismo tiempo, el funcionario subrayó que Rusia "no puede tomar medida alguna de distensión".
Asimismo, el portavoz reiteró que la guerra en Donbás es una guerra civil ucraniana de la que Rusia no forma parte.
"La guerra de Donbás es interna de Ucrania. Tenemos conocimiento de los intentos de presentar a Rusia como un participante de este conflicto. Esto no es así. Parar la guerra en Donbás solo se puede mediante negociaciones de ucranianos con ucranianos, [porque] es una guerra civil que fue provocada por los acontecimientos de 2014 y Rusia no forma parte de ella", enfatizó Peskov.
Además, el funcionario indicó que Rusia no ha reconocido las autoproclamadas repúblicas de Lugansk y Donetsk.
"Aún no ha habido tal reconocimiento, siguen siendo repúblicas autoproclamadas, pero vemos que se está retrasando el proceso de resolución de este conflicto interno ucraniano, en muchos aspectos está llegando a un callejón sin salida, por eso ¿qué perspectivas tendrán estas repúblicas? Ahora es difícil de pronosticar", remarcó Peskov.
"Aún no ha habido tal reconocimiento, siguen siendo repúblicas autoproclamadas, pero vemos que se está retrasando el proceso de resolución de este conflicto interno ucraniano, en muchos aspectos está llegando a un callejón sin salida, por eso ¿qué perspectivas tendrán estas repúblicas? Ahora es difícil de pronosticar", remarcó Peskov.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, confirmó que Ucrania está aumentando sus fuerzas militares en Donbás.
"Las Fuerzas Armadas de Ucrania están intensificando su potencial militar" en Donbás, dijo Zajárova ante la prensa.
La portavoz señaló que ahora en la zona de conflicto se encuentran 125.000 militares ucranianos, que es "la mitad de las Fuerzas Armadas de Ucrania".
Según los datos de la misión especial de observación de la OSCE en Ucrania, señaló, las violaciones del alto el fuego se registran actualmente no solo en zonas separadas, sino a lo largo de toda la línea de contacto.
A veces, indicó, la cantidad de estas violaciones supera los máximos registrados antes del 22 de julio de 2020, cuando fueron acordadas las medidas adicionales para reducir las tensiones en Donbás.
La diplomática apuntó que ahora los militares ucranianos con mayor frecuencia utilizan armas pesadas prohibidas por los Acuerdos de Minsk, y subrayó que los civiles son los que principalmente sufren las consecuencias de ese tipo de ataques.
12 de noviembre 2021, 09:52 GMT
En este contexto señaló que Moscú está preocupado por la falta de intentos de Kiev de solucionar de manera pacífica la situación en el este de Ucrania.
"El curso del régimen de Kiev para desmantelar el proceso de Minsk y la negativa de facto de Kiev a los intentos de resolver pacíficamente el conflicto en Donbás resultan preocupantes", dijo.
Mientras tanto, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, declaró que la Alianza vigilará activamente la situación en la frontera ruso-ucraniana y continuará su apoyo político y práctico a Ucrania.
"Vigilaremos activamente la situación [en la frontera entre Rusia y Ucrania] para asegurarnos de que contamos con todos los planes necesarios. Al mismo tiempo, seguiremos prestando apoyo político y práctico a nuestro socio Ucrania", dijo Stoltenberg en la cumbre de los ministros de Exteriores de los países del bloque, que se celebra en Riga del 30 de noviembre al 1 de diciembre.
"Vigilaremos activamente la situación [en la frontera entre Rusia y Ucrania] para asegurarnos de que contamos con todos los planes necesarios. Al mismo tiempo, seguiremos prestando apoyo político y práctico a nuestro socio Ucrania", dijo Stoltenberg en la cumbre de los ministros de Exteriores de los países del bloque, que se celebra en Riga del 30 de noviembre al 1 de diciembre.
Zelenski: conflicto en Donbás no puede terminar sin un diálogo directo con Rusia
El conflicto en Donbás no terminará sin conversaciones directas con Rusia, afirmó Zelenski.
"Tenemos que admitir que no podemos detener la guerra sin nuestro Ejército, y tenemos que decir la verdad de que no podemos detener la guerra sin negociaciones directas con Rusia, y todos los socios externos ya lo han reconocido hoy", dijo el miércoles Zelenski durante un discurso ante la Rada Suprema (Parlamento) del país.
Agregó que Kiev no tiene miedo de dialogar con Moscú y que Ucrania está al tanto cuáles son los países europeos que la apoyan y cuáles son los que fingen apoyarla a ella y a su independencia.
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en Donbás donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en respuesta al violento cambio de gobierno ocurrido en febrero del mismo año.
Los Acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política al conflicto, pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia.