"Estamos debatiendo con Letonia y, especialmente con Lituania, la activación del artículo cuatro [del Tratado del Atlántico Norte]", declaró Morawiecki a la agencia de noticias PAP.
De acuerdo con el artículo cuatro, "las Partes se consultarán cuando, a juicio de cualquiera de ellas, la integridad territorial, la independencia política o la seguridad de cualquiera de las Partes fuese amenazada".
Lituania, Letonia y Polonia llevan meses denunciando una avalancha de cruces ilegales desde Bielorrusia y acusan a Minsk de orquestar una crisis migratoria para desestabilizar a la Unión Europea en represalia por las sanciones.
Decenas de miles de personas migrantes ‒en su mayoría, procedentes de Irak, y otros países de Oriente Medio‒ intentaron en lo que va de este año cruzar las fronteras nororientales de la UE desde Bielorrusia.
Putin: Europa ha creado las condiciones para la crisis migratoria y quiere eludir su responsabilidad
14 de noviembre 2021, 11:00 GMT
El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, hostigado por Occidente tras su polémica reelección en agosto de 2020 y la represión de las protestas que siguieron al supuesto fraude en las urnas, advirtió en junio pasado que Minsk no tiene "ni dinero ni fuerza" para contener el flujo de migrantes.
Las autoridades polacas declararon el estado de emergencia en los territorios limítrofes con Bielorrusia e implicaron el Ejército y la Policía en la protección de las fronteras.
Por su parte, los guardias de fronteras bielorrusos acusan a sus colegas de Letonia, Lituania y Polonia de expulsar por la fuerza a los solicitantes de asilo hacia Bielorrusia.
En la zona fronteriza se han registrado varias muertes trágicas desde principios del año, por lo que la Agencia de la ONU para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones han recordado a los estados el imperativo de prevenir más pérdidas de vidas y garantizar el trato humano de los migrantes y refugiados.