Desde la noche del 8 de noviembre cientos de vehículos comenzaron a hacer filas en los puentes fronterizos ubicados en los estados mexicanos Sonora y Baja California; sin embargo, contrario a lo que se esperaba, la afluencia es la que en promedio tienen dichos sitios.
A través de redes sociales se compartieron las imágenes de los primeros viajeros que cruzaron la garita en San Ysidro, en Tijuana, y de quienes optaron por cruzar a EEUU a través de Nogales y otros puntos de Sonora como Agua Prieta y San Luis Ríos.
De acuerdo con información del Gobierno de Sonora, el 67% de los 5,7 millones de viajeros internacionales que se traslanda por tierra y pasan una noche en EEUU son mexicanos. En total, antes de la pandemia, se tenía una afluencia promedio anual de 25 millones de personas por estos puntos fronterizos.
El cierre de fronteras alejó a cerca de 15 millones de personas que viven o tienen familias entre las ciudades que dividen México de EEUU y dejó pérdidas económicas por 72.000 millones de dólares.
En marzo de 2020, y una vez que se declaró la pandemia por COVID-19 en todo el mundo, EEUU y México anunciaron el cierre de los puentes fronterizos y limitaron el paso para viajes de emergencia.
A raíz de la reapertura, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado en el que recordó que el acceso vía terrestre está limitado a las personas que cuenten con la vacunación completa contra COVID-19.
Hasta este 8 de noviembre, las autoridades estadounidenses únicamente aceptan a viajeros vacunados con Pfizer/BioNTech, Moderna, Johnson & Johnson y AstraZeneca.