"Mientras el presidente Vucic gobierne Serbia; mientras yo sea miembro de las estructuras de seguridad, Serbia no entrará en la OTAN", dijo el ministro al destacar que su país velará por "nuestra neutralidad militar".
Serbia, según el ministro, nunca apoyará sanciones a Rusia ni histeria antirrusa.
"La historia ha confirmado que toda rusofobia es serbofobia", destacó Vulin.
Si alguien ataca a Rusia, inevitablemente agrede a Serbia, concluyó.
Vacuna Sputnik V
El ministro del Interior dijo que se puso tres dosis de la vacuna Sputnik V contra el COVID-19, porque no duda de su eficacia y confía en la medicina rusa.
"Elegí Sputnik V, porque confío en la medicina rusa. Una de las revistas que más se venden en nuestro país se llama 'El doctor ruso'. Muchos en Serbia tienen la confianza en la medicina, los conocimientos y la ciencia de Rusia, yo estoy entre tales personas. La vacuna (Sputnik V) tiene alta eficacia. Gracias por haber preguntado cómo me siento, todo salió bien, no tuve ningunos efectos colaterales, estoy trabajando normalmente", dijo el ministro.
Según datos del Ministerio de Salud de Serbia, país de siete millones de habitantes, desde el inicio de la campaña de inmunización contra el COVID-19, que arrancó el 24 de diciembre de 2020, más del 53% de su población se vacunó con los preparados Pfizer, Sinopharm, Sputnik V o AstraZeneca.
Los ciudadanos y los extranjeros registrados en Serbia tienen el derecho a elegir el preparado. En el país ya han empezado a administrar la tercera dosis de la vacuna a las personas de los grupos de riesgo.
Los presidentes de Serbia y Rusia, Aleksandar Vucic y Vladímir Putin, en junio pasado dieron el comienzo a la primera fase de la fabricación de Sputnik V en Belgrado. Se espera que hacia finales del año en curso Serbia tenga el ciclo completo de producción de esta vacuna.
Los acuerdos para resolver la crisis
Serbia duda de que la Unión Europea pueda obligar a las autoridades de Kosovo a cumplir con los acuerdos para resolver la llamada crisis de las matrículas de los autos, dijo el ministro.
"Los albaneses de Kosovo no cumplen con los acuerdos, no mantienen su palabra, si no se les obliga. No veo voluntad por parte de la UE de obligar a Kurti [el primer ministro de la autoproclamada república] a cumplir con los acuerdos ", afirmó.
Vulin subrayó que, teniendo en cuenta la experiencia, duda mucho que se cumplan los actuales acuerdos y destacó que esa cuestión es necesario dirigirla a la UE, que media en las negociaciones entre Belgrado y Pristina.
Kosovo, que en 2008 proclamó su secesión unilateral de Serbia, prohibió el pasado 20 de septiembre la entrada en su territorio de los vehículos con matrículas serbias, obligando a los automovilistas a instalar una placa provisional del modelo local.
La medida provocó que los serbios organizaran protestas en varios puntos de control fronterizo en el norte de Kosovo. Ante las manifestaciones, Pristina mandó sus fuerzas policiales a la frontera para dispersar las concentraciones, mientras que Belgrado respondió enviando tropas y aeronaves militares.
El representante especial de la Unión Europea para el diálogo entre Belgrado y Pristina, Miroslav Lajcak, anunció el 30 de septiembre un acuerdo para allanar el camino a la solución de la llamada crisis de las matrículas.
Los grupos policiales de operaciones especiales, desplegadas en Jarinje y Brnjak, fueron retirados el 2 de octubre, simultáneamente con el levantamiento de los retenes.
La fuerza multinacional de la OTAN para Kosovo, KFOR por sus siglas en inglés, se emplaza allí por un período de dos semanas aproximadamente para garantizar la seguridad y la libertad de movimiento.
Como medida temporal, y hasta que se elabore una solución permanente, se utilizarán desde las 8:00 del 4 de octubre matrículas en forma de pegatinas.
También se establecerá un grupo de trabajo integrado por representantes de Belgrado, Pristina y la Unión Europea, bajo la presidencia de esta última, para buscar una solución permanente al problema de las matrículas de vehículos, de acuerdo con los estándares y las prácticas del bloque comunitario. El grupo celebrará su primera reunión el 21 de octubre en Bruselas y deberá presentar, dentro del plazo de seis meses, sus recomendaciones.