El concepto de inmunidad de rebaño —entendido como la protección sanitaria que recibe una población determinada al estar la mayoría de ellos protegidos con, por ejemplo, una vacuna— ha sido el faro de las campañas de vacunación antiCOVID en todos los países. Por eso, no es extraño el tono de orgullo con el que las autoridades de la provincia argentina de Tierra del Fuego reconocen que pueden considerarse el primer territorio en alcanzarla.
"Somos la primera provincia del país en alcanzar la inmunidad de rebaño. Gracias a los fueguinos y fueguinas por alcanzar juntos este gran logro", publicó el Gobierno de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
Javier Barrios, secretario de Gestión de Redes de Sistemas Sanitarios del Ministerio de Salud de la provincia, explicó a Sputnik que, si bien la inmunidad de rebaño es más un "término coloquial", puede considerarse que se alcanzó al tener el 92% de la población con una dosis y 72% con el esquema de vacunación completo, en una provincia que apenas supera los 160.000.
Eso no significa, sin embargo, que la pandemia haya terminado. "El concepto coloquial significa que no va a haber más transmisión de COVID, algo que con la vacunación no se está haciendo", aclaró el jerarca, recordando que la aparición de nuevas variantes hace que sigan detectándose nuevos casos aunque, gracias a la inmunización, son menos graves.
"Lo que hace la vacuna es disminuir la agresividad del virus y evitar las internaciones pero la transmisión sigue con las variantes nuevas", aclaró.
Sputnik, a la cabeza de la inmunización
Al igual que el resto de Argentina, Tierra del Fuego comenzó la vacunación con dosis de la vacuna rusa Sputnik V, para luego ampliar el programa a otras como la del laboratorio chino Sinopharm, el británico Astra Zeneca y los estadounidenses Moderna y Pfizer.
"La Sputnik V va liderando", destacó Barrios, indicando que fue la vacuna más dispensada en el territorio. El jerarca valoró que Argentina logró superar el retraso en la llegada de segundas dosis de Sputnik V, ofreciendo a los fueguinos la posibilidad de combinarlas con segundas dosis de Moderna. Quienes prefirieron esperar a la llegada del complemento de Sputnik, ya pueden recibirlo, por lo que la provincia se considera "al día" con la vacuna rusa.
Las claves del éxito
Si bien es la provincia menos poblada de Argentina, Tierra del Fuego logró un alto acatamiento de su población a la hora de vacunarse, resaltó el director.
"Nosotros tenemos la diferencia de que nuestra población se ha adherido mucho más y por eso hemos alcanzado tan rápido este porcentaje de vacunación", celebró.
La provincia está abocada ahora a completar la inmunización de los menores de 18 años, tarea que realiza con las vacunas de Pfizer pero podría ampliar a las demás a medida que se otorguen los permisos correspondientes.
Otro de los secretos del éxito fue la colocación de vacunatorios en las tres ciudades de la provincia —Río Grande, Ushuaia y Tolhuin— así como en los selectos "conglomerados rurales" de la provincia más austral de Argentina. En algunos casos, incluso, los vacunadores concurrieron a las casas de las personas con menos posibilidades de desplazarse para inmunizarlas a domicilio.
Río Grande por su perfil industrial y Ushuaia por su valor turístico fueron las urbes más favorecidas con la alta penetración de la vacuna. "A medida que avanzamos con la campaña de vacunación los casos y las internaciones bajan y eso nos da un respiro en cuanto a flexibilizaciones", comentó.
Así, Ushuaia, la ciudad más al sur del planeta, logró reactivar su actividad turística en el invierno argentino, con su capacidad hotelera y gastronómica ocupada al 100%. Por el momento, recordó el jerarca, todos los turistas son argentinos, aunque se aguarda la apertura de fronteras para poder recibir a extranjeros.