En una entrevista con Sputnik, Rudenko se mostró "sorprendido" por las declaraciones de que Bielorrusia estimula el tránsito de migrantes irregulares a través de su territorio hacia países de la Unión Europea, particularmente Lituania.
"En lo que se refiere a Lituania, debería colaborar con las autoridades de Bielorrusia haciendo frente al problema de migración ilegal que le preocupa, en lugar de dedicarse a la subversión, pero en Vilna rehúsan cooperar y apuestan por la confrontación", opinó el viceministro de Exteriores ruso.
El pasado 12 de julio, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) anunció el despliegue de un equipo de intervención rápida en Lituania, debido al creciente flujo de migrantes ilegales desde la vecina Bielorrusia.
Lituania declaró una emergencia a principios de este mes ante la avalancha de migrantes desde Bielorrusia cuyo presidente, Alexandr Lukashenko, hostigado por las sanciones de Occidente, advirtió que su país no tiene "ni dinero ni fuerza" para contener a los indocumentados que huyen de las zonas de conflicto y las penurias económicas a la Unión Europea.
En la primera semana de julio, las autoridades de Lituania registraron más de 800 cruces ilegales de la frontera desde Bielorrusia. El número de los migrantes irregulares detenidos en la frontera lituano-bielorrusa se multiplicó por 27 en relación con 2020, superando los 2.200 en lo que va de este año.