Respondiendo a una carta de Sputnik, el organismo aclaró que incumbe al Estado que inició la búsqueda excluir a una persona de la lista correspondiente y remitir esta información al banco de datos de la Comunidad de Estados Independientes. En este contexto, el Interior recomendó indagar los detalles del asunto ante los organismos competentes de Bielorrusia.
A principios de octubre pasado, Bielorrusia emitió contra Tijanóvskaya una orden de búsqueda internacional, por incitación a derrocar el gobierno o perturbar el orden constitucional. También Rusia incluyó a la opositora en su lista de personas buscadas.
Las elecciones presidenciales del 9 de agosto de 2020 en Bielorrusia, que otorgaron un nuevo mandato a Alexandr Lukashenko, dieron origen a varios meses de protestas.
Lukashenko, en el poder desde 1994, obtuvo el 80,1% de los sufragios, frente al 10,1% de la candidata opositora Svetlana Tijanóvskaya, según el escrutinio oficial.
La oposición bielorrusa denunció un fraude masivo y exigió repetir los comicios, opción que Lukashenko descartó.
En los primeros días las fuerzas del orden reprimieron las protestas con gas lacrimógeno, balas de goma, cañones de agua y granadas aturdidoras. Según el Ministerio del Interior, las movilizaciones se saldaron con tres muertos, centenares de heridos y miles de detenciones. Más tarde, la violencia callejera amainó, pero las protestas continuaron, al tiempo que las autoridades detenían o expulsaban de Bielorrusia a las figuras más visibles de la oposición.
Svetlana Tijanóvskaya permanece exiliada en Lituania.
Varios países, entre ellos EEUU, miembros de la Unión Europea, el Reino Unido y Ucrania, no reconocieron esos comicios. En cambio Rusia, China, varias naciones del espacio postsoviético, Cuba, Venezuela, Nicaragua y Turquía, entre otros, dieron por válidos los resultados de la votación.