"La pena no trasciende de la persona del condenado, no se impondrá pena o penas que aisladamente o en conjunto duren más de 30 años, excepcionalmente se impondrá pena de prisión perpetua revisable para las personas condenadas por delito grave cuando ocurran circunstancias de odio, crueles, degradantes, humillantes e inhumanas que por su impacto causen conmoción, rechazo, indignación y repugnancia en la comunidad nacional. La ley de la materia determinará y regulará su aplicación", dice ahora el artículo objeto de la modificación.
La Asamblea Nacional sesionó por primera vez, en el marco de su Trigésimo séptima legislatura, en Ciudad Darío, pueblo natal del llamado Príncipe de las Letras Castellanas, al cumplirse 154 años de su nacimiento.
El 11 de noviembre de 2020, el parlamento nicaragüense aprobó en primer debate la iniciativa de ley presentada por la bancada del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional, pero por tratarse de una reforma al texto constitucional, requería de repetir el trámite en dos legislaturas diferentes.
Porras destacó el hecho de que los nicaragüenses están unidos en el "mecanismo (parlamentario) que la democracia nicaragüense ha construido a punta de luchas y sangre durante años".
"Debemos defender nuestra democracia, el derecho de aquellos diputados que se abstuvieron (5), de los que votaron en contra (13) y él de mayoría (70) que votamos a favor, pero sobre todo, defender el derecho del pueblo nicaragüense”, reiteró el líder parlamentario.
Los nicaragüenses deben aprender a dilucidar, a discutir y a dirimir entre ellos los asuntos propios del país, dijo el presidente de la Junta Directiva.
“Tenemos que continuar haciendo las transformaciones legales, legislativas, el ordenamiento jurídico para defender a los hermanos nicaragüenses, entre más débiles, vulnerables y frágiles, más fuerte tenemos que defenderlos”, concluyó Porras tras agradecer la presencia de la Junta Directiva en pleno, así como todas las bancadas con representación parlamentaria.