Investigadores de la Universidad de Sydney y la Universidad de Roehampton en Londres encontraron que los canguros tienen sorprendentes capacidades cognitivas a la hora de comunicarse con seres humanos, similares a las de los perros, a pesar de que se trata de animales no domesticados.
Los hallazgos, publicados en la revista Biology Letters, van más allá y sugieren que, así como los canguros, otros animales marsupiales —subcategoría dentro de los mamíferos que incluyen canguros, koalas y topos, entre otras múltiples especies— podrían tener, de modo similar, la capacidad de comunicarse de manera intencional con los seres humanos.
¿Cómo se hizo la investigación?
La investigación fue realizada con 11 canguros cautivos (no domesticados), a los que se los expuso a lo que los científicos denominaron una "tarea irresoluble": una caja con comida que no podían abrir, con el fin de observar la reacción de los animales.
Ante esta situación, los animales comenzaron a mirar fijamente a los investigadores cuando no lograron abrir la caja solos, informó The Guardian. La mayoría de los canguros, en lugar de rendirse, se esforzaron por pedir ayuda, y miraban a la caja y al investigador una y otra vez, en un gesto de solicitar apoyo, explicó la doctora Alexandra Green, coautora del estudio.
"Me miraban a fijo a la cara, como lo haría un perro o un gato, como pidiendo ayuda", dijo por su parte a Reuters Alan McElligott, investigador de comportamiento animal en la Universidad de Hong Kong y autor principal del estudio. "Interpretamos esto como una forma deliberada de comunicación, una solicitud de ayuda. Realmente no se espera que las especies silvestres se comporten como esos sujetos, y por eso es sorprendente", añadió.
La investigación se basó en estudios previos realizados con caballos, perros y cabras que obtuvieron resultados similares. Si bien se trató de solo 11 canguros (aunque de diferentes especies), McElligott y Green sostuvieron que la investigación es una señal clara de que las capacidades de comunicación de los animales no domesticados han sido subestimadas por los seres humanos.