"Señor Presidente, hoy le pido respetuosamente que perdone al Sr. Julian Assange (...) Assange ha sido privado arbitrariamente de su libertad durante los últimos diez años. Este es un alto precio a pagar por el coraje de publicar información veraz sobre la mala conducta del gobierno en todo el mundo", escribió Melzer.
Assange está actualmente pendiente de extradición a EEUU por 17 cargos de espionaje, potencialmente punibles con una pena de prisión de 175 años.
El Departamento de Justicia de EEUU también busca la extradición del fundador de WikiLeaks por un cargo de uso indebido de computadoras por la publicación de información clasificada sobre las guerras estadounidenses en Irak y Afganistán y miles de cables diplomáticos estadounidenses entre 2010 y 2011.
La sentencia sobre su extradición se dictará el 4 de enero de 2021, pero dependiendo del resultado, es posible que el caso llegue a varios tribunales del Reino Unido antes de que concluya.
Melzer dijo que había visitado a Assange en la prisión de alta seguridad de Belmarsh en Londres con dos médicos independientes y podía dar fe de que su salud se había deteriorado gravemente, poniendo su vida en peligro.
La afección respiratoria de Assange lo vuelve extremadamente vulnerable a la enfermedad COVID-19, que se ha desatado recientemente en las instalaciones donde está detenido, dijo el experto.
Melzer también dijo que Assange debería recibir el perdón porque nunca ha publicado información falsa, ni ha pirateado o robado datos.
Assange obtuvo la información que publicó de fuentes auténticas de la misma manera que cualquier otro periodista de investigación realiza su trabajo, dijo Melzer.
"Al perdonar al señor Assange, señor presidente… rehabilitaría a un hombre valiente que ha sufrido injusticia, persecución y humillación durante más de una década, simplemente por decir la verdad", dijo Melzer.
Hace diez años, WikiLeaks publicó la mayor filtración de documentos clasificados de la historia, con cientos de miles de cables diplomáticos y archivos que exponen las atrocidades cometidas por las tropas estadounidenses durante las operaciones militares en Afganistán e Irak.