"Si hay alguna vacuna que es del diablo, destinada a infundir el 666 en la vida de las personas, destinada a corromper su ADN, cualquier vacuna de este tipo, señor Dios todopoderoso, podría ser destruida por el fuego en nombre de Jesús", rezó el funcionario sudafricano durante una ceremonia religiosa que fue celebrada en el hospital Tembisa y transmitida por la televisión.
Es la primera vez desde el inicio de la pandemia que un alto cargo judicial se manifiesta de esta forma contra la vacuna. La reacción a esta declaración no se hizo esperar. Rápidamente se empezó a temer que, tras escuchar sus plegarias, la gente desease evitar ser vacunada, informa la agencia Reuters.
Según la organización Africa 4 Palestine, especializada en la protección de los derechos humanos, los comentarios de Mogoeng "socavan la ciencia médica y la posición de Sudáfrica sobre la distribución de vacunas".
Por su parte, el profesor de virología de la Universidad de Wits Barry Schoub recordó que las vacunas desempeñan un papel importante en el control de esta pandemia y que "es lamentable que alguien con semejante influencia se oponga a los esfuerzos para controlarla".
Posteriormente, Mogoeng restó importancia a las preocupaciones de sus críticos y negó que estuviera poniendo en peligro la salud de los ciudadanos de Sudáfrica con sus tan controvertidos comentarios.
"No me preocupo por las consecuencias. Hemos estado callados durante mucho tiempo", declaró Mogoeng.
8 de diciembre 2020, 09:13 GMT
Al mismo tiempo, el magistrado sudafricano destacó que no cree que todas las vacunas persigan "una agenda satánica", pero que aquellas destinadas a hacer daño a la gente deberían ser destruidas. También sostiene que no afirmó como un hecho que dicha vacuna existiera, destaca el portal News 24. Si efectivamente existe una vacuna "limpia", añade, esta debería producirse cuanto antes porque hace falta, concluyó Mogoeng.
Sudáfrica ha registrado más de 22.700 muertes por COVID-19 desde el inicio de la pandemia. Se trata de la tasa de mortalidad más alta del continente africano. El país espera recibir sus primeras vacunas contra el coronavirus en el segundo trimestre del 2021 del esquema de distribución global COVAX.