La asunción de Luis Arce Catacora como presidente de Bolivia tiene una fiesta popular muy intensa en la plaza Murillo, donde se congregan las principales instituciones del Estado Plurinacional. Allí, desde el amanecer, el Consejo Nacional de Amawtas (quienes guardan la sabiduría de la cosmovisión andina) realiza una inmensa wajta, que es una ofrenda para la Pachamama, la Madre Tierra. El humo de sus sahumerios se sentía en toda la plaza, donde siguen los festejos populares por la recuperación de la democracia en Bolivia.
Cuando recién amanecía, decenas de amawtas iniciaron la celebración por la asunción de Arce como presidente y David Choquehuanca como vicepresidente. Soplaban sus inmensos caparazones de caracoles marinos, gritaban con sus manos hacia el cielo "jallalla", que es una expresión aymara de algarabía.
Una banda tocaba música andina, mientras los demás bailaban en círculo alrededor de la wajta humeante. Cada "jallalla" era respondido con otro "jallalla" en coro. "¡Jallalla proceso de cambio! ¡Jallalla hermanos amawtas! ¡Patria o muerte! ¡Venceremos!". Tampoco faltaron los 'jallallas' para el expresidente Evo Morales (2006-2019), quien regresará este lunes 9 de noviembre de Argentina, donde se tuvo que refugiar luego del golpe de Estado del 10 de noviembre de 2019.
Yawar Mallku explicó a Sputnik en qué consistió la wajta que realizaron para el presidente Arce. "Hemos empezado muy temprano, pidiendo permiso a los ancestros para hacer esta ceremonia milenaria. Queremos que en este proceso de cambio haya armonía, haya equilibrio, para que todos los hermanos tengan todo y no les falte nada", comentó.
Elizabeth Aragón es vicepresidenta del Consejo Nacional de Amawtas. "Hemos pedido esta mañana a la Pachamama que haya buena energía en nuestro futuro presidente —contó la maestra—, que sea con mucha qamasa" que es la fuerza espiritual, en la cosmovisión aymara.
Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS), se impuso en las elecciones del 18 de octubre, con el 55,1% de los votos. Sin embargo, la población civil que había apoyado al golpe contra Morales, últimamente se dedicó a manifestarse ante cuarteles militares para pedir a los uniformados que se hagan cargo del Gobierno nacional mediante las armas.
"Como pueblos indígenas, somos guardianes de nuestro presidente electo por la mayoría. Los indígenas vamos a cuidar su gestión", aseguró la amawta.
Luego de que Arce fuera posesionado por la Asamblea Legislativa Plurinacional, se dirigió a la plaza para sumarse a esta wajta. Tras quedar bien ahumado, el flamante presidente se llevó al Consejo de Amawtas a la Casa Grande del Pueblo, para que continúen con la ceremonia en ese edificio donde está el despacho presidencial.
"¡Fuera motines!", les gritaban quienes querían pasar a la plaza. "Motines" es el apodo que les quedó a las fuerzas policiales desde el 8 de noviembre de 2019, justo un año atrás, cuando decidieron amotinarse contra el entonces presidente Morales, con lo cual precipitaron la caída de su Gobierno. "¡Queremos pasar!", exigían.
En algún momento les permitirían la entrada, porque el 'desfile cívico' de las organizaciones sociales está programado para las 15 horas en el cronograma de actividades de este día de recuperación de la democracia.