"Una semana después de los disparos de los que fue víctima Nikolaos Kakavelakis, un sacerdote ortodoxo griego de 52 años, [que los recibió] frente a su iglesia en el séptimo distrito de Lyon, un sospechoso se encuentra bajo custodia policial", publicó el medio en su página web.
Según los datos del medio, el sospechoso, un georgiano de 40 años, fue detenido el viernes en el primer distrito de Lyon por los investigadores de la policía judicial.
El detenido confesó haber cometido el ataque, al destacar que no planeaba asesinar al sacerdote con el que su mujer tenía un romance.
La mujer confirmó la información sobre el romance con el sacerdote, al agregar que no tenía ni idea sobre los planes de su marido.
El propio sacerdote que salió del coma el 3 de noviembre, supuso que su atacante podría ser "un marido celoso" de una de sus amantes.