Una de las fuentes relató por teléfono que los mercenarios que ya participan en los combates en Karabaj están sufriendo bajas.
"[En los últimos días] fueron trasladados a Turquía los cuerpos de siete combatientes muertos, y también llegaron 18 heridos", detalló el interlocutor de Sputnik.
Además reveló que los cuerpos de los mercenarios abatidos en Nagorno Karabaj permanecen en las morgues turcas mientras se tramiten los documentos de salida.
También destacó que los mercenarios firman contratos por un plazo de seis meses, que es el intervalo de la rotación de los combatientes, y por lo tanto las noticias sobre su regreso de Nagorno Karabaj no se corresponden con la realidad.
El presidente de Siria, Bashar Asad, había comentado en una entrevista con Sputnik que grupos de radicales estaban trasladándose desde Siria a Nagorno Karabaj y que Turquía utiliza terroristas sirios y de otros países en esa república rebelde.
Además, Asad acusó al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de ser el promotor de la nueva espiral del conflicto en Karabaj.
El 27 de septiembre volvieron a estallar los choques armados en Nagorno Karabaj, foco de conflicto entre Armenia y Azerbaiyán desde que ese territorio, de población mayoritariamente armenia, decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
El 10 de octubre, los ministros de Exteriores de Armenia y Azerbaiyán tras más de 10 horas de negociaciones sostenidas en Moscú con la mediación de su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, acordaron cesar el fuego desde el mediodía del mismo día, efectuar el canje de los prisioneros y de los cuerpos de los abatidos, así como coordinar los detalles concretos del armisticio.
Pero ya ese mismo día las partes empezaron a dirigirse acusaciones mutuas de estar infringiendo el armisticio.