"Logramos demostrar que esa vacuna induce un alto título de anticuerpos en ratones desde los primeros siete días, también un alto título de respuesta en conejos, y se hacen experimentos en otros animales para conseguir respuestas de inhibición del reto con el virus [SARS-CoV-2]", explicó el doctor Vérez.
El primer candidato vacunal cubano contra el COVID-19, recibió la autorización del Centro Estatal para el Control de la Calidad de los Medicamentos (Cecmed) en la isla para iniciar los ensayos clínicos a partir del próximo 24 de agosto, con una primera fase que se desarrollará de manera aleatoria y controlada en un esquema de dos dosis, mientras que la segunda fase está prevista para comenzar el 11 de septiembre.
El proyecto de la vacuna Soberana 01 contra el COVID-19 es resultado de un trabajo conjunto entre investigadores y científicos del Instituto Finlay de Vacunas, el Centro de Inmunología Molecular, y la Universidad de La Habana.
El pasado 19 de mayo el presidente cubano Díaz-Canel hizo un llamado a la comunidad científica nacional a intensificar el trabajo de búsqueda de una vacuna propia que proporcionara soberanía, y a partir de ahí, los investigadores iniciaron una intensa faena que permitió presentar a la autoridad regulatoria un candidato vacunal que, según los expertos, presenta "pocas incertidumbres, bajo riesgo, y resultados alentadores" en la fase preclínica.
"La gente tiene que entender que aunque es un camino que abre esperanzas, es un camino largo, de meses, de rigor en los ensayos clínicos en cada una de sus fases, y por lo tanto hay que exigir más responsabilidad social para evitar rebrotes y obtener el resultado final en mejor condición, para aplicar la vacuna masivamente", subrayó el mandatario cubano.
"Cosas como esta hazaña de la ciencia —agregó Díaz-Canel—, son de las cosas que a uno le reafirma cada vez más el sentimiento de orgullo de ser cubano".
El pasado 15 de agosto, Rusia inició oficialmente la producción de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la pandemia de COVID-19, que hasta la fecha ha contagiado a casi 22 millones de personas alrededor del mundo.
Otros proyectos vacunales contra el COVID-19 se desarrollan en China, Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido, entre otras naciones.