"Acordate, o te vas con elecciones nacionales democráticas o te vas con una convulsión social, porque el pueblo está cansado", advirtió en conferencia de prensa el líder de la FSTMB, Orlando Gutiérrez, dirigiéndose a la gobernante que se niega a promulgar la ley con el argumento del peligro de la pandemia de COVID-19.
La posición sindical se sumó a la presión que ya ejercían sobre la presidenta transitoria el parlamento controlado por el Movimiento Al Socialismo, otros partidos políticos y el mismo Tribunal Supremo Electoral (TSE), que concertaron la ley que establece que los comicios deben realizarse el 6 de septiembre, a más tardar.
El Gobierno "a nombre de pandemia está empobreciendo al pueblo boliviano, está saqueando nuestra riqueza queriendo privatizar la educación, la salud, queriendo privatizar nuestros recursos naturales. No lo vamos a permitir", dijo Huarachi, denunciando sometimiento de Áñez al Fondo Monetario Internacional.
Gutiérrez, más enfático, denunció corrupción en el Gobierno y aseguró que quienes en algún momento lucharon "por un cambio" se sienten ahora decepcionados.
"Por eso me voy a dirigir a la señora Áñez. Le quedan dos caminos: uno es aprobar de manera inmediata la fecha de elecciones el 6 de septiembre, el segundo camino es la sublevación del pueblo", advirtió.
La presidenta Áñez, quien gobierna desde noviembre con el único mandato constitucional de conducir elecciones, tiene plazo hasta este viernes 19 para firmar o devolver al parlamento la ley sancionada hace nueve días.