Con la aparición del SARS-CoV-2 y su rápida propagación por el mundo, muchas personas perdieron sus empleos, sobre todo los informales, que no constituyen cifras despreciables, máxime en los países del sur, donde es tan complicado encontrar un trabajo con todas las de la ley.
La enfermedad deja secuelas enormes en la industria turística, que emplea a cientos de millones de personas en el mundo, por el cierre de las fronteras y el consiguiente cese de los vuelos ante las férreas medidas para evitar la propagación.
Hasta ahora no han sido muchas las empresas que anunciaron públicamente recortes de personal desde ya o para los próximos meses, aunque algunas aerolíneas y fabricantes de automóviles tomaron la delantera.
Easyjet anuncia el despido de un tercio de su personal
En las últimas horas, la compañía de bajo costo Easyjet, de capital británico, anunció que reduciría el 30% de su personal y que disminuiría su flota para adaptarse a las nuevas condiciones del mercado, tras la crisis provocada por el coronavirus.
También adelantó que dejaría su flota en unos 302 aviones, lo cual significa una reducción del 15%, a pesar de que planea reiniciar los vuelos para el 15 de junio a nivel interno, y a Francia, siempre con total observación de las medidas de seguridad para los pasajeros y las tripulaciones de cada una de sus aeronaves.
En marzo pasado, con la abrupta llegada del coronavirus a Europa y su rápida expansión por la mayoría de sus países, pero sobre todo por Italia, España, Francia, el Reino Unido y Alemania, Easyjet decidió suspender sus vuelos, aunque sería mejor decir que no tuvo otra opción que hacerlo.
American Airlines también recorta
Hace unas horas, también, la compañía aérea estadounidense American Airlines informó que despedirá el 30% de sus empleados a causa de la crisis provocada por la pandemia de coronavirus.
La vicepresidenta ejecutiva de Recursos Humanos de la compañía, informó a los trabajadores que se prevé reducir la propia empresa, y "dirigir una aerolínea menor significa que se necesitará alrededor de un 30% menos de directivos y de empleados comunes".
Una carta, que la cadena CNN tiene en su poder, exhorta a los empleados a presentar la renuncia y advierte que si el número de voluntarios que se marchan resulta insuficiente, la compañía procederá a despidos forzados, aunque todos esos trabajadores seguirán recibiendo sus salarios hasta el 30 de septiembre.
Según la revista Forbes, la compañía cuenta con una plantilla de 133.700 personas, por lo que los recortes afectarían a más de 40.000 empleados de la aerolínea, que tiene su sede en la ciudad de Miami.
La lista se amplia
No solo las grandes aerolíneas anuncian recortes, sino los fabricantes de aviones y automóviles, entre ellos Boeing, Renault y Nissan, quienes ya anunciaron la salida de trabajadores o el cierre de alguna de sus líneas de producción, lo cual genera incertidumbre, aunque solo sea por aquello de que "si ves las bardas de tu vecino arder...".
En abril Boeing anunció que reduciría en un 10% su plantilla mundial de 160 mil trabajadores, y luego de exhortaciones a la renuncia voluntaria, Calhoun advirtió que "ahora hemos llegado al desafortunado momento de tener que comenzar los despidos involuntarios. Estamos notificando a los primeros 6.770 miembros de nuestro equipo estadounidense esta semana que se verán afectados".
Nissan y Renault, cierres y despidos
El fabricante de coches japonés Nissan confirmó a los sindicatos de la compañía y al Gobierno de España el cierre de sus plantas en Barcelona, donde trabajan más de 3.000 personas, y aunque el vicepresidente del Gobierno español, Pablo Iglesias, advirtió que nacionalizar las plantas en Cataluña es una posibilidad para evitar los despidos, la situación de los obreros es complicada.
Nissan perdió 6.200 millones de dólares en el año fiscal 2019-2020, que finalizó el 31 de marzo, y resaltó en un comunicado que la pandemia del coronavirus influye en los resultados globales de su gestión, razón por la cual decide cerrar algunas de sus plantas por el mundo.
El consorcio prevé además suspender sus proyectos para aumentar la capacidad de sus plantas en Marruecos y Rumanía, así como analizará la adaptación de sus líneas de producción en Rusia.
Estos son solo algunos ejemplos de grandes empresas que anuncian el despido de sus empleados. Otros tomarán las determinaciones y no dirán nada, lo cual incrementará considerablemente el ejército de desempleados que ya era enorme antes de la llegada del coronavirus.