Así, los tres vehículos esparcieron una disolución de mil litros de agua por 20 de lejía por la arena de la playa. El objetivo según la entidad local autónoma de Zahara de los Atunes, dependiente del Ayuntamiento de Barbate, era limpiar la costa para que los niños la usaran. Motivo por el que este organismo de la localidad gaditana y la asociación de comerciantes del pueblo Acoza decidieron pulverizar más de dos kilómetros de playa, sin el permiso del consorcio municipal de Barbate, que se desvincula de esta acción.
A través de los vídeos y las llamadas incrédulas de los vecinos de la población, este acto llegó a oídos de la Delegación Provincial de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, que ya estudia una sanción. Esta dependerá del daño causado al medioambiente y será asumida según declaró a el diario El País, el presidente de la entidad autónoma, Agustín Conejo, quien también admite el error: "Reconozco que fue un error. Si toman alguna medida, la acataré".
Zahara de los Atunes es una de las localidades andaluzas que se blindó desde el principio para evitar los contagios por coronavirus. Mediante su sistema de desinfección y un arco de limpieza a la entrada del pueblo, hasta la fecha no han detectado ningún caso entre sus 1.300 habitantes.