"Nos negamos a morir en la cárcel", sostiene un cartel mostrado por los internos desde el techo de la prisión.
Los presos tomaron el control de al menos dos pabellones de la prisión, donde hay 1.694 detenidos, aunque la capacidad del complejo es de 1.683 internos.
Los reclusos consiguieron subir al techo y romper las chapas que configuran la cubierta.
Armados con palos y protegidos con mantas, para evitar el impacto de las balas de goma, los internos desplegaron desde allí otra pancarta en la que se lee "el COVID-19 está en Devoto. Jueces Genocidas. El silencio no es mi idioma".
Las protestas surgieron durante la madrugada, con quema de colchones y destrozo del inmobiliario, y continuaron durante esta mañana, cuando se registró el ruido de detonaciones que podrían provenir de disparos de balas de goma.
Hasta el lugar se desplazó la Policía de la ciudad de Buenos Aires, que aseguró el perímetro con personal del cuerpo de infantería, grupos de dispersión y unidades de bomberos.
A finales de marzo cinco internos murieron en dos penales de la provincia argentina de Santa Fe (centro-este), dos de ellos calcinados, durante varias protestas que comenzaron en la víspera en reclamo de medidas de prevención por el coronavirus.
El máximo tribunal penal de Argentina recordó la situación de hacinamiento en la que se encuentran los internos y por ello recomendó alternativas a la prisión, como excarcelaciones o salidas domiciliarias para personas mayores, enfermos crónicos, mujeres embarazadas o con niños a su cargo y para quienes estén por terminar su condena.
En todo el país 167 personas murieron en todo el país por el coronavirus entre los 3.435 pacientes que contrajeron el virus SARS-CoV-2.
En Argentina rige la cuarentena obligatoria desde el 20 de marzo y continuará en vigor al menos hasta el 19 de abril.